De contrastes viven los congresos, sean de médicos, de partidos o el de los diputados. Mas aún si se celebra en Benidorm, una ciudad instalada en los contrapuntos de la bermuda en chanclas con el abrigo y la bufanda. Para muestra el Hotel Gran Bali este fin de semana con tumbonas repletas de torsos tomando el sol junto a la piscina y, a su alrededor, corrillos trajeados en negociaciones. Porque un congreso socialista siempre tiene caras ocultas.
En busca del himno. «Va a sonar nuestro himno», avisaron cuando el acto oficial de inauguración iba a comenzar. Entre algunos delegados surgió la duda: «¿Cuál de todos?». Y en ese alzar de hombros y enumerar las muchas posibilidades que en el PSPV se puede considerar tal título reverencial, señalaron que todas las respuestas conducían al mismo camino: levantarse cuando sonase. Instantes después, el himno regional se estrenó en un acto socialista.
Unos de pie, otros sentados. Para diferencias las formas de seguir un discurso. La mayoría, hasta que las sillas se acaban, lo prefiere hacer sentado. Claro que siempre hay quien, con sitio, acaba de pie, al fondo de la sala, entre el castigo de una negociación rota y la protesta como fue el caso del sector abalista complementada, además, con una llegada tardía y una salida temprana mientras hablaba Puig.
Estreno de la patronal. Novedoso fue que sonase el himno regional, pero también que una de las intervenciones la interpretase el presidente de la patronal, Salvador Navarro, un contrapunto a sus «amigos y a veces adversarios» los sindicatos, también presentes.
Negociación a ritmo de altavoz. La música, no obstante, fue la forma de amenizar la tarde de negociaciones en los múltiples cuartos y llamadas y hasta en las bambalinas se colaban los temas que lanzaban los altavoces del hotel.
Con recuerdo a València. E igual que las reuniones de antiguos alumnos son para glorificar las grandes noches de fiesta, los socialistas tienen en ese pedestal el 40 Congreso del PSOE que se celebró en València. En lo bien acogidos y el buen ambiente vivido se centraron los mensajes enviados desde los diferentes líderes territoriales del partido para dar su apoyo a Ximo Puig.
