Más de 260 toneladas de paja del arroz se han recogido esta campaña en el término municipal de València con los beneficios que esto supone para el sector agrícola, el ganadero y para la población al evitar la emisión de 200 toneladas de CO2 que habría supuesto su quema.

El concejal de Agricultura, Alimentación Sostenible y Horta del Ayuntamiento de València y vicepresidente del Consell Agrari Municipal (CAM), Alejandro Ramon, destacó el «éxito» de la presente campaña.

El edil puso en valor que, con ella, se ha evitado la crema de la paja del arroz: «Se ha conseguido no solo evitar la emisión de 209 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera, sino que además hemos evitado las molestias que esa quema genera para la población, fundamentalmente de los Pueblos del Sur y también otras zonas de València, por la gran cantidad de humo que esto genera». En este sentido, precisó que los recientes episodios con humo en la ciudad «los produjo la quema de paja del arroz en otros términos municipales próximos». «Ese humo también puede ser muy molesto para la circulación por carreteras como la CV-500, e incluso puede generar problemas respiratorios», remarcó.

Alejandro Ramon destacó la importancia de la introducción este año de la hiladora, una herramienta que ha permitido optimizar el proceso de recogida, «a pesar de que hemos tenido jornadas con lluvia y condiciones meteorológicas adversas que han provocado que la paja se encontrara en unas condiciones de humedad mayores».

Finalmente, resaltó que la experiencia piloto ha sido positiva por haber conseguido recoger «más cantidad de paja y en un mejor estado» y ha subrayado que la paja recogida, como en años anteriores, se destinará a uso del sector ganadero.