Las asociaciones en defensa del territorio y el ferrocarril Per l’Horta, Acció Ecologista Agró, CGT Ferrocarril y Usuàries del tren valencià mostraron ayer su oposición frontal al estudio informativo de la línea de alta velocidad Valencia-Castelló, en información pública desde el 21 de octubre.

Entre otros motivos alegan que «el AVE es un consumidor fabuloso de recursos públicos con escaso retorno social y económico que ha gastado ya más de 60.000 millones de euros, sin que ninguna línea se rentable, mientras cercanías y mercancías tienen inversiones mínimas. El Estado insiste en repetir errores del pasado», defendió Joan Ramón Ferrandis del sector ferroviario de la CGT.

Desde Per l’Horta consideran que el proyecto de alta velocidad Valencia-Castelló «ignora que l’Horta es un espacio protegido. Es inconcebible que algunas propuestas de trazado se hagan sobre territorio protegido». Un territorio por el que se movilizaron 120.000 personas para pedir su protección y que fructificó con la ley de l’Horta en 2018 y la declaración en 2019 por la ONU como un «sistema importante de patrimonio agrícola mundial, equivalente a patrimonio de la humanidad de los sistemas agrícolas». Por ello, para Josep Gavaldà, miembro de Per l’Horta «no tiene ningún sentido proteger un territorio para continuación proponer una gran infraestructura por encima. Es como declarar l’Albufera parque natural y a continuación proponer instalar una central nuclear». Los cuatro colectivos critican la «falta de transparencia y participación mostrada por el ministerio al exponer dos proyectos (el del túnel pasante y el de la LAV Valencia-Castelló) con más de 5.000 páginas de elevado contenido técnico con 30 días de alegaciones, que han tenido que alargar a 45». También lamentan que el estudio no contemple la alternativa cero (obtener mejores resultados gestionando mejor y haciendo actuaciones en la línea existente) ni un análisis de coste de oportunidad». Por ello piden serenidad

Como conclusión, las asociaciones piden «serenidad y un replanteamiento claro de objetivos que no conduzca nuevamente a un desperdicio de recursos tal y como ocurrió con la línea de alta velocidad Valencia-Xàtiva por la que no ha pasado un solo tren pero nos ha costado 800 millones», por lo que piden «la retirada del proyecto».

Desde el Ayuntamiento de València, que preparan informes sobre el proyecto para remitirlos al ministerio, señalan que apuestan por el eje pasante y el corredor mediterráneo «con la opción que menos afecte a l’Horta». El concejal de Agricultura, Alejandro Ramón, confirmó que se ha convocado el Consell de l’Horta para «consensuar una respuesta conjunta» al proyecto.