La «economista de formación y tecnóloga de convicción», Laura Olcina, moderó la tercera y última mesa de debate del Foro de Liderazgo Femenino. Junto a la directora general del Instituto Tecnológico de Informática (ITI) se encontraban María Benjumea, CEO de South Summit; Victoria Majadas, socia fundadora en Smart To People y presidenta de Big Ban Inversores Privados; y Margarita Albors, presidenta de Social Nest Foundation.

María Benjumea, CEO South Summit. ED

¿El motivo? Ahondar en la casuística que centró el coloquio «Economía del conocimiento: el papel de las mujeres líderes». Solo el 23 % de los CEO a nivel nacional son mujeres, un dato alarmante que no pasó desapercibido para la totalidad de la mesa.

Ellas, a través de su desarrollo profesional, desafían una estadística que, desde el punto de vista empresarial, todavía se escribe en masculino. No obstante, esta realidad disyuntiva también arroja datos esperanzadores, pues según la Organización Internacional del Trabajo que las empresas con mujeres directivas son más rentables.

Victoria Majadas, presidenta de Big Ban Inversores Privados. ED

«¿No os parece un sinsentido ?», planteó Olcina a las participantes. «A mí no me educaron para llevar la vida que he construido», denunció María Benjumea, «la distribución de los roles en el momento en el que yo accedo a la universidad me orientaba más al cuidado de la casa que a una formación académica vinculada al emprendimiento».

Por su parte, Majadas advirtió que «no percibir barreras no significa que no existan».

Margarita Albors, presidenta de Social Nest Foundation. ED

Uno de los aspectos que se analizó en el encuentro fue la infantilización a la que son sometidas las mujeres que ostentan cargos de responsabilidad y que, además, son jóvenes. Así lo evidenció la presidenta de Social Nest Foundation.

Margarita Albors manifestó que «la educación es fundamental para el progreso», que aunque notable, todavía debe desarrollarse, así como que «las mujeres debemos asumir nuestro rol». Es decir, que las mujeres ocupen espacios de decisión y liderazgo para generar nuevos referentes.

Laura Olcina, directora general del ITI. ED

A este respecto, la falta de visibilidad también copó la atención en esta tercera mesa. Desde el alegato empoderante de la CEO de South Summit sobre la horizontalidad de las jerarquías empresariales, que atribuyó a las mujeres, hasta la puesta en valor de la conciliación y la convivencia con la culpa expuesta por Albors o la reivindicación por la formación STEM efectuada por Majadas, las tres participantes dibujaron un escenario, aunque atravesado por dificultades basadas en el género, ofrece múltiples oportunidades a las mujeres.