Mientras los trabajos para la reforma de la financiación continúan por la vía de las alegaciones, las arcas de la Generalitat Valenciana siguen dependiendo de los mecanismos extraordinarios como el FLA. El Ministerio de Hacienda ha enviado este martes la primera remesa del Fondo de Liquidez Autonómica de 2022, la correspondiente con el primer trimestre.

Del total de 10.758 millones distribuidos por el Gobierno central del Fondo de Financiación, a la Comunitat Valenciana le corresponden 2.781 millones, el 25 % del total, lo que le sitúa como la segunda autonomía con más recursos extraordinarios de financiación solo por detrás de Cataluña, a la que han llegado más de 4.800 millones.

Además del FLA, las cuentas autonómicas han recibido otros 600 millones de euros del departamento que dirige María Jesús Montero del Fondo Liquidez React-UE para 2022, una ayuda extra a la que se han adherido Asturias, Cataluña, Murcia, La Rioja y Comunidad Valenciana y a las que ha repartido 1.500 millones de euros.

Se trata de una herramienta que permite a las comunidades que lo han solicitado un anticipo de estos recursos para facilitar liquidez financiera, que permita el rápido despliegue y absorción de estas ayudas comunitarias, facilitándoles recursos financieros para la realización de proyectos y actuaciones sin comprometer su presupuesto ni el calendario de pagos del resto de proveedores.

Ambos mecanismos suponen una inyección de oxígeno a las cuentas valencianas, dotándolas de liquidez para los gastos a los que ha de hacer frente la Administración autonómica, pero suponen un problema de cara al futuro ya que se añaden a la ya importante deuda acumulada que a finales de 2021 se alzaba por encima de los 52.000 millones de euros, la segunda más alta de España.