El pasaporte covid continuará siendo necesario para entrar a establecimientos como restaurantes o cines en la Comunitat Valenciana. Pese a que la autorización del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana decae el próximo lunes 31 de enero, la Generalitat ya plantea solicitar su renovación. Es la principal medida que se debatirá en la Mesa Interdepartamental que el Consell convocará esta semana.

La idea que maneja el 'president' Ximo Puig es extender en el tiempo las restricciones que actualmente están en vigor y que se basan en el requerimiento del certificado vacunal para poder acceder a espacios cerrados en los que es posible quitarse, momentáneamente, la mascarilla. "La pandemia sigue entre nosotros", justifica el jefe del Consell quien considera que no habrá "ninguna novedad" en la revisión de las medidas.

Más dudas plantean desde sus socios, al menos desde la parte parlamentaria, que siempre han sido más incisivos en la petición de medidas más duras. En este sentido, la portavoz adjunta de Compromís Aitana Mas afirma que no se trata de "poner restricciones por poner", sino de confirmar si surten efecto o no, y señala que la situación "está bastante descontrolada" en el número de contagios por lo que el Consell tiene que "reevaluar" las medidas y ver si mantiene o si quita alguna.

Compromís critica que la situación está "descontrolada" en contagios y Unides Podem reclama reforzar la atención primaria

Por su parte, la síndica de Unides Podem, Pilar Lima, asegura que respetarán las decisiones que adopte el Consell en la Mesa Interdepartamental, lo que "no quita" por apostar por el fortalecimiento de la atención primaria de la sanidad pública, donde ya se está "tardando" en aplicar un plan que afronte la situación actual. En la formación morada, el vicepresidente y conseller de Vivienda, Héctor Illueca, ya se mostró en diciembre partidario de incrementar las restricciones más allá del pasaporte covid.

Y si en un lado de la cámara se habla de la posibilidad de ampliar las limitaciones sociales, en el otro es prácticamente al contrario con críticas hacia el uso del pasaporte covid. La síndica de Ciudadanos, Ruth Merino, considera que no debería ampliarse la medida, porque "da una falsa sensación de seguridad que puede incluso haber contribuido al aumento de contagios".

Los datos "son muy preocupantes y se ha hecho evidente que esta herramienta no ha evitado la propagación del virus", señala Merino, para quien "es el momento" de dejar de exigir el pasaporte covid especialmente en los establecimientos de ocio y hostelería, por "los graves perjuicios económicos" que les ocasiona.

La visión es contraria a la que defiende Puig quien asegura que la petición del certificado de vacunación ha dado estabilidad a los hosteleros, ha generado "mayor seguridad en los espacios cerrados" y ha logrado que se incremente el número de personas que han recibido la vacuna de la covid.

Por su parte, desde el PP, la portavoz adjunta en las Corts, Elena Bastidas, cree que es "difícil" tener un posicionamiento sobre esta cuestión, dado que no disponen de los informes en los que se basan "las decisiones políticas" que adopta Puig y su equipo ni tampoco conocen a los expertos que les asesoran.

Coronavirus en la Comunitat Valenciana