El abandono escolar temprano alcanzó en 2021 su cifra más baja desde que existen registros en España, con un 13,3% de personas de 18 a 24 años que no había completado la segunda etapa de Educación Secundaria (FP de Grado Medio, Básica o Bachillerato) y no seguía ningún tipo de formación, según se desprende de la última Encuesta de Población Activa (EPA) publicada hoy.

En la Comunitat Valenciana ya lleva 7 años consecutivos de caída lo que, en este indicador, es buena señal, pues cada vez más adolescentes siguen con sus estudios más allá de la ESO.

El Ministerio de Educación ha destacado este viernes que se trata de un descenso de la media estatal de 2,7 puntos respecto al porcentaje de 2020, lo que iguala la mayor caída desde el año 2000. Además, el departamento que dirige Pilar Alegría ha apuntado que, desde el ejercicio 2011, la tasa de abandono escolar temprano en España ha disminuido 13 puntos, pasando del 26,3% al 13,3%, reduciéndose prácticamente a la mitad.

En la Comunitat Valenciana, la tendencia continua siendo positiva y la caída es mayor que la media estatal, por tanto, un dato más positivo aún. En 2021, la tasa de estudiantes que deja sus estudios con el título de la ESO es del 12,8 %, casi tres puntos por debajo de la media española, y es inferior también al dato autonómico de 2020, que se quedó en 15,5 %.

Este porcentaje viene reduciéndose anualmente desde 2014, cuando estaba en 23,4 %; en 2015 fue del 21,4 % y del 2016 al 2018 -con la llegada del Botànic- estuvo en el 20,02 % y 20,03 %. Fue en 2019 cuando ya bajó del 20 % (16,4 %) y se mantiene así hasta ahora, con el dato más bajo de los últimos 20 años.

De hecho, si se compara el dato del 2021 con el de 2002, el más antiguo que aparece en las estadísticas del ministerio y del INE, se observa la magnitud de la evolución: al pasar en 20 años del 36 % del alumnado que no iba más allá de la enseñanza obligatoria – 1 de cada 3- al 12,8 % actual, menos de 2 de cada 10.

Por tanto, ahora hay tres veces menos abandono temprano en la Comunitat Valenciana que hace prácticamente dos décadas. Asimismo, actualmente la evolución positiva se produce, además, más rápido, pues entre el 2002 y el 2010 hubo varios años en los que el porcentaje no varió prácticamente, estancado entre el 31 y 32 %. Es decir, entonces 1 de cada 3 alumnos no pasaba de la ESO y decidía ahí poner fin a su educación.

La ampliación de la oferta de FP es una de las claves de la mejora de este parámetro, pues buena parte de estudiantes que finalizan la ESO se matriculan en un grado medio, además de Bachillerato. De hecho, la Conselleria de Educación trabaja desde hace cursos para que todo el alumnado tenga, como mínimo, un FP de grado medio en su currículum.

Este curso, el sistema educativo valenciano (enseñanza pública y concertada) cuenta con 61.426 estudiantes de Bachillerato, 93.478 matrículas en FP de grado medio y superior; y 11.351 alumnos en FP Básica.

Comparación entre CC AA

Si se observan los datos de 2021 junto a los de las otras autonomías, la Comunitat Valenciana se sitúa por debajo de la media española (13,3 %), si bien aún le queda camino para acercarse a las CC AA con menos porcentaje y ya está más cerca del objetivo del 10 %. En concreto, el País Vasco es donde se registra el dato más bajo (4,8 %), junto a Cantabria (6,4 %) y Galicia (8,1 %) en el top 3. Junto a estas, Navarra (9,1 %) también está debajo del 10 %.

Por su parte, la C. Valenciana está en un amplio grupo de comunidades con datos entre el 10 y el 13 % (por ejemplo, junto a Aragón, 12,4%; Madrid, 10,7 %; o Castilla y León, 12,4 %).

Por encima de la media se encuentran Extremadura (14 %); Cataluña (14,8 %); Baleares (15,4 %); y Castilla-La Mancha (15,5 %); y Murcia (17,3 %). Andalucía, que es el farolillo rojo, con el 17,7 % de abandono temprano.

En este sentido, el gobierno ha reforzado el Programa para la orientación, avance y enriquecimiento educativo (#PROA+).

Conceptos diferentes

Cabe recordar que la tasa de abandono escolar no es sinónimo de la tasa de abandono educativo temprano. En el segundo indicador —el que protagoniza esta noticia—, se incluyen los estudiantes que, tras finalizar la educación obligatoria (ESO) con éxito, deciden no continuar con estudios de Bachillerato, FP u otro tipo de enseñanza no reglada, por lo que se quedan con los aprendizajes básicos.