Enfermeros y fisioterapeutas se han concentrado este jueves en centros de salud de las capitales de provincia de la Comunitat Valenciana, bajo el lema "Salvemos la Atención Primaria", para denunciar el "grave deterioro, abandono y precariedad" que sufre el primer escalón de la Sanidad. Convocados por el Sindicato de Enfermería, Satse, estos profesionales han exigido medidas que mejoren la atención y cuidado que se presta a pacientes y ciudadanía.

La secretaria general del Satse en la Comunitat Valenciana, Mª Luz Gascó Marín, ha asegurado a EFE que quieren denunciar la "escasez de profesionales" que llevan arrastrando desde hace años y que se ha visto agravada durante la pandemia de la covid-19.

Según Gascó, el colectivo de Enfermería ha sido el que más se ha contagiado de coronavirus, "algo lógico porque son los profesionales que se dedican al cuidado, las 24 horas del día y los 7 días de la semana, de los pacientes con covid". "Esto ha llevado a muchas bajas y debido a la escasez de profesionales en estos momentos en bolsa, a una sobrecarga laboral enorme".

Según ha afirmado la dirigente sindical, en la Comunitat Valenciana, donde hay alrededor de 12.000 profesionales de Enfermería, harían falta otros 13.000 para cubrir la ratio europea, establecida en 7,8 enfermeras por cada cien mil personas, cuando aquí es de poco más de 4.

Harían falta otras 13.000 enfermeras para cubrir la ratio europea, establecida en 7,8 profesionales por cada cien mil personas

"Desde el sindicato pedimos a la Conselleria de Sanidad que de las 6.000 plazas estructurales que ha prometido que va a hacer, muchas de ellas sean para los profesionales de Enfermeria y Fisioterapia", ha manifestado.

Respecto a los fisioterapeutas, ha dicho que solo son unos 500 en toda la Comunitat Valenciana, un "número totalmente insuficiente para el papel tan importante que tienen y más cuando tenemos una población envejecida donde se ha aumentado la expectativa de vida y se ha disminuido la natalidad".

Concentración Sindicato de Enfermería Ana Escobar

Los profesionales han denunciado la sobrecarga y tensión emocional, el aumento de esperas para ser atendido de manera presencial, el poco tiempo del que disponen para atender y cuidar a cada persona o la supresión paulatina de programas de prevención y promoción de la salud, así como de hábitos de vida saludable.

Otros aspectos fundamentales para el colectivo y el conjunto de la ciudadanía, según el Satse, son el desbloqueo en la tramitación parlamentaria de la Ley de Seguridad del Paciente.

También que se posibilite la jubilación anticipada voluntaria y que se permita la reclasificación profesional en el grupo A, sin subgrupos, además de acabar con la temporalidad y precariedad laboral que vienen sufriendo desde hace años.