El Conseller de Educación, Vicent Marzà, ha manifestado, después de hacerse pública la agresión a un docente en un instituto de Bétera, su "firme condena al odio que, desgraciadamente, intenta entrar a los centros educativos en personas jóvenes que también son víctimas de los que mueven estos discursos".

El conseller ha subrayado a través de sus redes sociales que la agresión de Bétera "es un caso muy grave" y asegura que se ha puesto en marcha el protocolo de acompañamiento jurídico al profesorado, como ya ha publicado este periódico. Además, afirma que ha contacto con el profesor agredido. "He trasladado personalmente toda mi solidaridad y lo vuelvo a hacer públicamente", escribió en un mensaje de Instagram.

Cabe recordar que la semana pasada, Miquel Álvarez, docente de Camp de Túria, sufrió un ataque con insultos homófobos en un centro de Secundaria por parte de un grupo de estudiantes, al recriminarles su actitud LGBIfóbica, como respuesta a dos alumnas que el día anterior habían mostrado en el patio las banderas multicolor y la trans.

Ayer, al menos una docena de estudiantes ya habían sido expulsados por estos hechos, según pudo saber Levante-EMV, y no se descartaba que el número aumentara, según avancen las identificaciones de los implicados, confirmaban las fuentes consultadas que apuntan que, en esto, están colaborando otros estudiantes.

Por el momento, la Conselleria de Educación ha confirmado que se activó el Plan de prevención de la violencia y de promoción de la convivencia (PREVI), que incluye el asesoramiento y asistencia jurídica gratuita a la víctima, además de la unidad de orientación específica de igualdad y convivencia que "ya está aplicando las acciones de sensibilización y acompañamiento", asegura Marzà.

No obstante, se desconocen más datos sobre el avance de la investigación y si el profesor, el centro o la Generalitat han denunciado los hechos por la vía judicial.

La agresión he levantado una ola de solidaridad hacia el centro y Miquel Álvarez, y ya han hecho pública su repulsa hacia los hechos desde sindicatos como CC OO, Stepv, UGT o ANPE, además del Ayuntamiento de Bétera y de otros institutos, como el IES Benicalap de València.