El escenario de vigilancia sanitaria de la pandemia da hoy un giro radical en España. Con la puesta en marcha de la nueva estrategia de control epidemiológico, Sanidad da por terminados los confinamientos obligatorios y las pruebas diagnósticas para la población general, y opta así por focalizar los esfuerzos en proteger a los más vulnerables ante el coronavirus: mayores de 60 años, personas con enfermedades inmunodepresoras o sanitarios.

Estas son las principales novedades y algunas claves para adaptarse a la nueva realidad, que entra hoy en vigor tras dos años de crisis sanitaria.

¿A quién se le realizarán pruebas desde hoy lunes?

Únicamente deberán someterse a pruebas diagnósticas las personas mayores de 60 años, las inmunodeprimidas y las embarazadas que presenten síntomas.

Asimismo, también se incluye en este grupo a las personas que sufran un cuadro de infección respiratoria aguda de vías bajas y que requieran ingreso hospitalario y aquellas que hayan estado en los 14 días previos en una región donde circule una variante de «interés o preocupación».

En todos los supuestos previos, se recomienda que si tienen síntomas leves permanezcan en su domicilio hasta disponer del resultado del test. De ser positivo, se dará como caso confirmado y, en caso contrario, deberá seguir las instrucciones que indiquen los profesionales.

¿Quién debe autoconfinarse en caso de test positivo?

La población general no incluida en los anteriores supuestos no tendrá que aislarse, sino que deberá «extremar las precauciones y reducir todo lo posible las interacciones sociales» durante los 10 días posteriores al inicio de síntomas. Se exceptúa aquí a los trabajadores de ámbitos vulnerables o cuidadores de personas vulnerables. Estos no deberán ir a trabajar en los cinco días posteriores al diagnóstico y, pasado ese plazo y tras más de 24 horas sin síntomas, se les realizará un test de antígenos, que de ser negativo permitirá la reincorporación laboral.

¿He de guardar cuarentena si he estado con un positivo?

No. Ya a inicios de mes se fijó que los contactos estrechos no realizaran cuarentena, si bien se les pide extremar precauciones los 10 días siguientes. Como sucede con los aislamientos, solo se rastrearán los contactos estrechos registrados en ámbitos de personas vulnerables.

¿Debo acudir a trabajar si tengo síntomas?

En casos leves no se realizarán pruebas, por lo que esa persona nunca será considerada positiva por el sistema sanitario. El documento publicado por el Ministerio de Sanidad establece la recomendación de que en estos casos, siempre que sea posible, se opte por el teletrabajo. En este punto falta concreción pero, por el momento, si no se puede trabajar a distancia por las particularidades del empleo y el médico no concede una baja médica, el empleado deberá acudir a su puesto de trabajo portando la mascarilla en interiores.

¿Cómo se vigila ahora la evolución de la pandemia?

Sin hacer pruebas a los menores de 60 años —grupo poblacional que ha registrado el 85 % de los contagios desde el inicio de la pandemia en la C. Valenciana—, resulta evidente que no se van a obtener datos fiables de la evolución de la covid. Ahora, serán los ingresos hospitalarios o los casos en residencias los que den pistas sobre la incidencia. En todo caso, los expertos remarcan que en las últimas semanas los indicadores habían perdido fiabilidad por la gran cantidad de asintomáticos y de personas que se autotestaban durante la sexta ola.

¿En qué situación llega la C. Valenciana al cambio de modelo?

En la última actualización de la Conselleria de Sanidad, la incidencia a 14 días se situaba en 400 puntos en la C. Valenciana. Salvador Peiró la considera una tasa «alta» y advierte de que los casos «van a seguir subiendo unos cuantos días», aunque se va a perder capacidad de detección al hacer menos test. El experto señala que, pese al efecto de Fallas, la tendencia alcista se da en toda España y que el fin de los aislamientos tendrá «cierto impacto» en la curva. «Veremos si este se da en dientes de sierra o si seguimos en subida», remata.