Según la Asociación Derecho a Morir, entidad que lleva años luchando por una ley de eutanasia, los países donde esta práctica es legal, su aplicación supone entre el 1 % y el 4 % del total de fallecimientos anuales.

La entidad hace el cálculo para la población española. «En un año normal (sin pandemia) en España fallecen algo más de 420.000 personas, por lo que es razonable estimar que entre 4.000 y 17.000 personas decidan adelantar su muerte cada año una vez la ley esté asentada». La experiencia internacional, continúa DMS, «sugiere que las cifras serán más reducidas al principio e irán en aumento según crezca el conocimiento sobre la ley entre la ciudadanía, los profesionales sanitarios y las propias administraciones». Según la entidad es una norma que cuenta con el apoyo de la mayoría de la ciudadanía en general, y de los profesionales sanitarios en particular. Más del 70 % de los españoles según una consulta del CIS antes de que se aprobara la ley apoyan la eutanasia. Los profesionales de la medicina y la enfermería «respaldan esta práctica en porcentajes similares al de la población general».