Las precipitaciones registradas en los últimos meses han provocado daños importantes en los cultivos de la Comunitat Valenciana. Según los datos facilitados por la Asociación Valenciana de Agricultores (Ava-Asaja), debido al frío que llegó tras las lluvias, "más del 90 % de la producción de almendras se ha perdido en Utiel-Requena". Además, señalan que otras comarcas interiores como la Hoya de Buñol, el Valle de Ayora o Los Serranos también tienen graves pérdidas.

"El problema no es que sean unas lluvias puntuales más o menos fuertes, como las de estos últimos tres días, sino que son muchas semanas con mucha humedad, pero también con unas temperaturas muy bajas para esta época del año", explica Isidro López, responsable del departamento de seguros agrarios de la Ava-Asaja. La asociación estima unas pérdidas totales de 30 millones.

Asimismo, en el informe de la asociación apuntan que las bajas temperaturas han agravado los daños ya provocados por las precipitaciones en naranjas y mandarinas, "tanto las pendientes de recolección como la floración de la próxima campaña". De hecho, las flores que están abiertas "corren el riesgo de pudrirse".

"Ayer por la tarde [por el pasado miércoles] tuvimos momentos de un vendaval tremendo, eso tira la fruta al suelo. También hay algunas que se golpean entre ellas o con las ramas y se producen lesiones que deprecian su valor en el mercado. Cuando vamos a comprar una naranja lo que queremos es que visualmente esté bien. El viento tiene ese doble perjuicio: la pérdida en cantidad de producción y de calidad, de valor comercial", añade al respecto López.

En el documento de la asociación también incluye la producción de caqui. "Padece brotes florales helados en zonas frías de La Ribera Alta, La Costera y Camp de Túria. Incluso algunos que no presentan síntomas de heladas están empezando a caer al suelo", informan. En el mismo sentido, destacan las pérdidas medias del "30 o 40 % en melocotones, nectarinas, paraguayos, albaricoques, ciruelas y cerezas", con una afección del 100 % en las frutas de hueso "en zonas hondas y frías de La Ribera Alta, La Vall d’Albaida, La Costera, el Valle de Ayora y La Marina Alta".

Retrasos en la siembra

Además, el clima está poniendo trabas a las labores de los agricultores. "Determinados cultivos en los que hay que entrar al campo, ahora mismo es imposible porque tenemos zonas que están totalmente encharcadas y otros tienen tal exceso de humedad que tienen hongos", subraya López.

En este sentido, según las cifras de la Ava-Asaja, hay pérdidas de calidad y producción a causa de la presencia de estos organismos en las hortalizas de temporada, con una "merma media del 50% en cebollas y patatas de L’Horta y La Ribera". "El exceso de humedad y temperaturas como las de hoy que son un poquito más altas son un caldo de cultivo para los hongos", indica López.

Desde la La Unió de Llauradors i Ramaders, Carles Peris, secretario general, señala el retraso de "algunas siembras de cultivos de verano, de hortalizas de verano, por ejemplo, del melón o la sandía". "Si no puedo preparar el terreno voy a tener que plantar más tarde y las cosechas pueden venir más atrasadas y no pueden salir tan ordenadas al mercado", detalla.

Además, también incide en la campaña de los cítricos. "El agua ha retrasado la recolección, por lo tanto determinadas variedades están demasiado maduras en campo y entonces apremia un poquito más poder sacar el producto", señala.

El secretario general destaca que, en el caso del cereal, "las lluvias han sido muy buenas". "Estábamos al límite de que no saliera el que se había plantado y, sin embargo, se ha recuperado de una forma excepcional", reconoce.