La Conselleria de Sanidad empezará desde hoy viernes a llamar según orden de bolsa a los 5.040 profesionales que van a cubrir a partir del 1 de mayo las nuevas plazas estructurales con las que va a crecer la plantilla de la sanidad pública valenciana.
Según fuentes de la Administración autonómica, las llamadas a los trabajadores de bolsa se iban a suceder durante toda la semana que viene para asegurar que el máximo de plazas estuvieran cubiertas a comienzos de mes, sobre todo porque el día anterior se extinguirán los más de 6.000 contratos de refuerzo covid-19 que se hicieron en su día para asumir la avalancha de trabajo que trajo consigo la pandemia de coronavirus en centros de salud y hospitales.
Por ahora, la Conselleria de Hacienda ya ha autorizado 4.000 de las 5.000 nuevas plazas según se trasladó el miércoles a los sindicatos en mesa sectorial y, aunque se retrasara el proceso para convocar a los trabajadores en bolsa, desde la administración tienen capacidad para hacer "unas 1.000 llamadas al día", según se confirmó a sindicatos.
Pese a que, tal como recuerdan desde la Administración, es el "mayor incremento de plantilla" que ha tenido nunca la sanidad valenciana -en septiembre se añadirán otras 1.000 plazas más- este cambio de contratos que se sucederá el día 1 (de los temporales de refuerzo al de interinidad en plaza estructural) ha llegado envuelto en la polémica.
Las críticas: un aumento "corto" y un reparto descompensado
La primera crítica de sociedades científicas y sindicatos fue que, al menos en el primer momento, la llegada de profesionales ocupando una plaza no va a cubrir el monto total de trabajadores que hay ahora reforzando el trabajo (y cubriendo los agujeros de las maltrechas plantillas) ya que salen del circuito más de 1.000 contratos.
En este sentido, esta misma semana la Sociedad Valenciana de Medicina Preventiva y Salud Pública alertaba de cómo se puede resentir el programa de vacunación con cuartas dosis a pacientes inmunodeprimidos a partir de mayo tras la salida del personal de refuerzo ya que pasan de tener 43 contratos (11 de médicos y 32 de Enfermería) a tener 11 plazas de facultativos.
Además, los perfiles van a ser distintos (justificados por la bajada de la pandemia) y el reparto por departamentos de salud (tanto en cantidad como en especialistas) también ha generado múltiples quejas entre sociedades científicas, sindicatos e incluso trabajadores de Sanidad, con incluso la renuncia en bloque de la Dirección de Enfermería del hospital de Alcoy. De hecho, se han unido a las críticas los intensivistas, internistas, pediatras, preventivistas, enfermeros o incluso médicos , que denunciaron sentirse "marginados" por su poca representación frente a la Enfermería.
Negociación con áreas de salud tras las quejas
De hecho, las 5.040 plazas del 1 de mayo tampoco serán las anunciadas a los sindicatos en su día ya que, en estas semanas desde el anuncio, la Conselleria de Sanidad ha tenido que reconfigurar el reparto que había fijado en alguno de los 24 departamentos de salud tras las quejas recibidas entre ellos precisamente el de Alcoi, según confirmaron ayer fuentes sindicales.
Desde Sanidad, confirmaron que se han llevado a cabo "ligeros ajustes" en el reparto de categorías profesionales pero no concretaron en cuántas áreas se ha hecho esta reconfiguración. Eso sí, fuentes de la conselleria aseguraron que no serán 5.040 las creadas "sino más" ya que en varias áreas se ha pedido adelantar algunas de las 1.000 contrataciones que se habían dejado para el mes de septiembre.
