La Mesa por la Educación en Libertad -formada por representantes de la enseñanza concertada- se adhiere al “Manifiesto en defensa de la enseñanza como bien público (contra la LOMLOE y las leyes que la preceden)” dado a conocer recientemente por un nutrido grupo de intelectuales y docentes, como Fernando Savater, Félix de Azúa, Javier Marías o Arcadi Espada.

La Mesa considera que “coinciden” plenamente con “muchos” de los puntos de este manifiesto. En diferentes ocasiones, la plataforma denunció que la Lomloe, y los reales decretos que la desarrollan, conducen a una “devaluación del sistema educativo” y a “un retroceso”, ya que “no abordaba los problemas técnicos y pedagógicos del sistema educativo, siendo una ley “de parte” con “un marcado carácter ideológico, igual que sus predecesoras”.

Entre otras cosas, según la Mesa por la Educación en Libertad, el manifiesto reclama que los conceptos “de tipo moral o ideológico” queden fuera de las aulas “gobiernen unos partidos u otros, con orientaciones morales e ideológicas diversas” para que no se corra “el peligro de que el sistema educativo se convierta en instrumento para adoctrinar”.

En esta línea, denuncian “la imposición de ideologías políticas por encima de la búsqueda de consenso con los miembros de la comunidad educativa” y recuerdan que las administraciones públicas tienen “deber de neutralidad ideológica”.

La Mesa recuerda que ha lamentado en diversas ocasiones que en la actual reforma, y en el conjunto del sistema educativo, “han prevalecido los intereses ideológicos por encima de objetivos pedagógicos y que no se prima el interés formativo del alumno”. “Un ejemplo claro ha sido el decreto de evaluación y promoción, como una estrategia para camuflar los datos de fracaso escolar, además de atentar contra la cultura del esfuerzo”, apuntan.

La Mesa por la Educación en Libertad está integrada, entre otras entidades, por la Federación Católica de Asociación de Padres de Alumnos (FCAPA), las patronales de la enseñanza concertada Feceval y Escuelas Católicas (Escacv), los sindicatos USO-CV, FSIE y Apprece CV, la Universidad Católica de Valencia y el CEU Cardenal Herrera.