Alejandro Tiana, el secretario de Estado de Educación, ha presentado en València las conclusiones que España ha extraído de la 12ª Cumbre Internacional de la Profesión Docente (ISTP, en inglés), organizada en la capital del Turia por la OCDE y la International Education.

Al final de la tercera y última jornada, cada uno de los países participantes han mostrado sus compromisos para el futuro próximo que, según han incidido desde la organización, serán seguidas para comprobar su cumplimiento.

En el caso de España, Tiana, en ausencia de la ministra Pilar Alegría, ha explicado que el ministerio se marca tres puntos, muy presentes en el debate educativo actual.

En primer lugar, la "capacitación del profesorado para desarrollar la competencia digital del alumnado". En este sentido, Tiana ha explicado que "no es solo sobre el uso de la tecnología digital, sino también sobre un uso ético y responsable, teniendo en cuenta cómo pueden evolucionar".

Sobre esta cuestión, en un encuentro previo con los medios de comunicación, Tiana ha detallado que, además de España, otros países como Finlandia, Dinamarca o Estados Unidos también se habían preocupado por este aspecto de la digitalización, sobre todo en relación a las implicaciones a la Inteligencia Artificial o los algoritmos, "cómo esto puede ser formativo y no disruptivo en el sistema educativo", ha añadido.

El segundo de los objetivos españoles presentados en la cumbre es el de "avanzar hacia una equidad del sistema". En este sentido, ha detallado especialmente el hecho de prestar atención educativa "a los niños de temprana edad, particularmente aquellos que provienen de entornos vulnerables y cuya inserción mejora con este apoyo".

Por último, el secretario de Estado de Educación ha apuntado a la necesidad de "reforzar el papel del profesorado", con el objetivo de que la escuela tenga un "carácter transformador y de apoyo que nos permite crecer como sociedad, comprometida con la justicia social, la inclusión, la solidaridad y la sostenibilidad como cuestiones fundamentales".

Mirada internacional

En cuanto a los otros países, República Checa y Estonia han recordado entre sus medidas la inclusión del alumnado ucraniano en sus aulas; Finlandia también ha apostado, como España, por la "equidad" y por dar a los niños "cuanto más apoyo antes, mejor"; Hungría examinará al alumnado de una asignatura de desarrollo sostenible; Lituania implantará un modelo de carrera docente basado en las competencias y el conocimiento de cada profesor; y Singapur pretende reforzar la relación de las escuelas con la sociedad, una especie de "alianzas" con las familias y el resto de agentes.

También han estado presentes Dinamarca, Letonia, Suecia, Suiza, Reino Unido y Escocia, y Estados Unidos. Este último país ha destacado el "diálogo fantástico de los últimos días", en referencia a la cumbre acogida por València.

Valoración

Alejandro Tiana ha asegurado que han sido “días muy intensos”, pero que desde el Ministerio de Educación están “muy satisfechos” por el resultado de la cumbre, que se ha celebrado durante dos jornadas en València y tuvo el miércoles sesiones preparatorias.

No es tan frecuente tener este intercambio directo, estos debates, la construcción del conocimiento continuo para construir enfoques y ver perspectivas y cómo las compartimos”, ha asegurado el secretario de Estado en la clausura.

En referencia a la Lomloe ha asegurado que “ha sido un honor compartir los cambios implementados en España y escuchar voces y puntos de vista de otros delegados y con los que conectamos”.

Asimismo, ha puesto en valor la cooperación de las administraciones con los sindicatos docentes: “los sistemas educativos solo cambian si trabajamos conjuntamente”.

Por esto, igual que también ha planteado Singapur, Tiana ha propuesto crear ‘hubs’ educativos “donde todos debemos participar: familias, Gobierno, profesorado… para empoderar al alumnado y darle herramientas que mejoren su vida”. “La educación no se puede disociar de la inclusión o equidad”, ha concluido.

La cumbre debía haberse realizado en 2020 en València pero la covid-19 lo impidió, dando pie a dos ediciones online hasta la actual, que ha recuperado la presencialidad. Su principal objetivo ha sido «establecer un diálogo social articulado en torno al futuro de la educación», sobre todo en el contexto actual, marcado por el impacto de la pandemia en el sector educativo, y en relación a la reducción de desigualdades, digitalización y lucha contra el cambio climático.