El fiscal de Medio Ambiente de la Fiscalía de Valencia, Eduardo Olmedo, ha propuesto que se fomente la actuación de la Policía autonómica en materia medioambiental y protección animal, dotándole de más medios materiales y humanos para ser las "manos" de la Fiscalía contra los delitos medioambientales.

Olmedo ha planteado que se cree una unidad adscrita a la Fiscalía de Medio Ambiente, pero también un cuerpo de peritos veterinarios forenses -algo que no existe en España- y que se impulsen las unidades de Policía Local especializadas en maltrato animal, como las que hay en València, Burjassot, Torrent o Paterna.

El fiscal se ha pronunciado así en la comisión de Agricultura, Ganadería y Pesca de las Corts, donde ha comparecido, a petición de todos los grupos parlamentarios, para informar sobre el proyecto de ley de la Generalitat de protección, bienestar y tenencia de animales de compañía y otras medidas de bienestar animal.

A su juicio, esta ley supone un "avance enorme" sobre la ley vigente de 1994 y corrige algunas de las deficiencias que se han visto en estos 28 años, aunque ha alertado de algunos problemas que puede tener la norma en su aplicación práctica si no se hacen algunos cambios de redacción.

Así, ha indicado que la futura ley valenciana se ha decidido que se aplique solo a los animales de compañía, igual que todas las comunidades autónomas menos La Rioja, pero lo considera "opinable", pues implica un "problema grave" cuando hay otros animales objeto de aplicación de la ley, como animales de producción que dejan de estar en la cadena, por ejemplo un cerdo vietnamita usado de mascota.

Además, ha considerado que la definición que la ley hace de maltrato es un "error", pues habla de una acción violenta sobre un animal que provoque lesiones que "menoscaben gravemente su salud", lo que implicaría que "pegar una patada a un animal y causarle un hematoma" no sería sancionable administrativamente, lo cual "es absurdo y va en contradicción con el resto de leyes de toda España".

Olmedo ha propuesto en consecuencia que la norma valenciana considere maltrato toda conducta que inflige a un animal dolor o sufrimiento, mientras que ha alertado de que se recoge como infracción leve dejar a un animal en un vehículo estacionado que afecte a su salud, cuando el Código Penal lo contempla como delito grave, con pena de prisión.

También ha señalado que debería considerarse como infracción muy grave, y no grave, cuestiones como la preparación para peleas o las mutilaciones, y ha señalado que la futura ley recoge conductas que son a la vez delitos e infracción administrativa, por lo que debería haber una cláusula de salvaguarda para que no haya una doble imposición.