El escrito de la Fiscalía de la Comunitat Valenciana donde respalda la competencia del Tribunal Superior de Justicia para imputar a la vicepresidenta de la Generalitat, Mónica Oltra, por la actuación como máximo responsable de la Conselleria de Políticas Inclusivas en la supuesta ocultación del caso de abusos a una menor tutelada por la que fue condenado su por entonces marido, notificado ayer a las partes, aprecia indicios racionales de hasta tres delitos.

Según este escrito, serían los siguientes delitos en los que presuntamente habría incurrido la consellera: prevaricación, abandono de menores y omisión del deber de perseguir delitos.

Plan preestablecido

La fiscal, en base a la exposición razonada de hechos realizada por el Juzgado de Instrucción número 15 de València, habla de un «plan preestablecido» para ocultar y desacreditar los abusos relatados por la menor. Así habla de una supuesta orden verbal que «no fue escrita, dada su flagrante ilegalidad», y que habría dado Mónica Oltra como superior jerárquica de todos los funcionarios investigados y dirigida a los mismos para que incoaran una información paralela a la judicial «con objeto de desvirtuar la credibilidad de la menor».

En otro punto del informe se señala que «podría alegarse que algún funcionario, técnico, psicólogo, etc, se equivocó, pero ¿todos?; ¿todos se equivocaron?. Se deduce, a nivel indiciario, la existencia de una directriz de actuación por parte de todos —autoridades, funcionarios y personas intervinientes— de disminuir la importancia y ocultar los abusos».

La Fiscalía, preguntada por cuál podría ser la finalidad de todo ello, se responde: «El beneficiario directo era Luis Eduardo, exmarido de Oltra, superior jerárquica de los funcionarios intervinientes y beneficiaria también de esa manera de proceder, en cuanto le beneficiaba a su marido ocultando los abusos y a ella en cuanto era un medio idóneo para eludir las posibles responsabilidades políticas y/o penales».

Del mismo modo, considera delictivo no haber informado de los hechos denunciados por la víctima hasta cuatro meses después, cuando finalmente el caso fue puesto en conocimiento de la Fiscalía de Menores por una intervención policial tras una fuga de la menor.

Actitud incomprensible

Esta omisión considera que evidencia «una voluntad de dejarlo correr». Por ello, la Fiscalía tacha la actitud de la conselleria de «incomprensible» y «extraña», y considera que solo es comprensible cuando se descubre que el autor de los abusos denunciados era el marido de la vicepresidenta y responsable de esta misma conselleria.

Este mismo lunes la defensa de Oltra solicitó a la sala el archivo de la causa al no haber «indicios objetivos de criminalidad» que justifiquen el proceso penal y aseguró que la vicepresidenta no dio orden «directa ni indirecta» para ocultar datos de la investigación o perjudicar a la menor.