El discurso y los delitos de odio están aumentando los últimos años y las entidades y asociaciones del colectivo LGTBI lo viven en sus carnes. Primero llegó a las instituciones y poco a poco está aterrizando en la sociedad. Así lo asegura David Vidal, activista y organizador Orgullo LGBTI en València que se celebra este sábado. El lema de la marcha de este año es "Davant l'odi: Drets i Orgull".

Más de 60 entidades participarán en la manifestación tras firmar un manifiesto contra la Lgtbifobia. La marcha reivindicativa partirá a las 20 horas del Puente de la Exposición de València y recorrerá todo el centro de la ciudad por la Puerta de la Mar, calle Colón, calle Xátiva y Marqués de Sotelo hasta llegar a la plaza del Ayuntamiento. Allí se leerá el manifiesto a las 22 horas y se dará inicio a la fiesta del orgullo para acabar con el disparo de un castillo con colores del arco iris a las doce de la noche.

El motivo por el que las entidades salen a la calle es el odio. El institucional y el cada vez más cotidiano. Como explica Vidal, "soy activista desde los 17 años y ahora con 31 no recuerdo épocas tan malas como esta". Aunque la asociación no lo haya visibilizado en sus redes, la sede de Lambda volvió a ser vandalizada hace algunos días, su placa tapada con pintura negra y grafitis con la palabra "maricones" en la puerta. Vidal cuenta que han perdido la cuenta de las veces que ha sucedido este año: "creo que cinco o seis", explica.

Más de veinte agresiones en un año

La policía tuvo conocimiento de 20 agresiones por motivos de orientación sexual o identidad de género en el año 2020, según el informe sobre la evolución de delitos de odio en España elaborado por el Ministerio de Interior. La fiscalía de delitos de odio de València estima que solo una de cada diez agresiones de este tipo se denuncian, con lo que la cifra mayor puede ser, en realidad, mucho mayor. Además, en todo el año 2021, un total de 7.107 personas acudieron a las oficinas Orienta de la Generalitat, sobre todo para recibir atención psicológica y muchas de ellas personas trans. 

Vidal denuncia que la llegada de la extrema derecha a las instituciones ha traído también la "institucionalización del discurso del odio, que poco a poco va calando en la sociedad". Ante ello, desde el orgullo piden "reaccionar" y salir a la calle para reclamar derechos en contra de "el discurso de odio y quienes lo lanzan, que están intentando meternos de nuevo en los armarios", denuncia.

Agresiones

Vidal habla de las agresiones lgtbifóbicas que se han dado este año, sobre todo en zonas como la Plaza de Honduras de València y en torno al ocio nocturno, y asegura que "los datos muestran un repunte de estas agresiones en toda España", motivo por el cual salen a la calle. "El discurso de odio empieza llegando a las instituciones y poco a poco baja a la calle hasta que llegan las agresiones", remarca.

Por su parte dice que el hecho más grave se está dando en torno al colectivo de personas transgénero. "Sobre todo creo que la situación mas grave se da con las mujeres trans, porque no solo es la extrema derecha, sino un sector del feminismo que hace demasiado ruido para arrinconarlas", denuncia. Y añade que "esta situación me recuerda a mí mismo cuando salí del armario y me decían que no era homosexual, que era algo, que experimentara. Pues con las personas trans pasa algo parecido cuando niegan su realidad y lo que son. Yo no me siento gay, lo soy, pues a las mujeres trans se les está negando que sean mujeres" argumenta Vidal.

Vidal recuerda que la situación entre el colectivo trans es muy oscura en todos los ámbitos. "La tasa de paro entre el colectivo es del 80 %", por eso pide avanzar en derechos y la aprobación pronto de la ley trans estatal, que blinda y protege al colectivo y avanza en la despatologización de la transexualidad. "Hay que dotar de derechos a estas personas, sobre todo a las mujeres, para que su situación se normalice, tengan acceso a trabajo y no acaben siendo prostituidas, que es un problema todavía muy común. Es algo urgente", reclama.

Educar en la diversidad

Ante esto Vidal reclama "mucha educación y pedagogía, educar en derechos y en diversidad desde bien jóvenes", pero sobre todo "denunciar todas estas situaciones de lgtbifobia", ya que según la fiscalía de delitos de odio de València, a penas una de cada diez agresiones de este tipo se comunican en comisaría. "Aunque te increpen por la calle, pero no tenemos que callarnos cuando vivamos estas situaciones", explica Vidal.

Otro de los episodios lgtbifóbicos vividos este año en la C.Valenciana fue la retirada temporal de 30 libros de educación sexual y temática lgtbi de las escuelas de Castelló a raíz de una denuncia de Abogados Cristianos. Sobre esto Vidal dice que "es el mundo al revés. Se nos acusa a nosotros de adoctrinar cuando solo queremos que se conozca toda la diversidad que existe, que es algo súper importante. Ante eso, hay gente que está en contra de la diversidad y quiere volver a los grises", lamenta Vidal.