La nueva vicepresidenta del Consell, Aitana Mas, es partidaria de mantener la fórmula que el Botànic utilizó el año pasado para negociar los presupuestos de la Generalitat, la de una comisión política nombrada por los partidos. Un organismo que de alguna forma arrincona al conseller de Hacienda porque las cuentas ya le vienen cocinadas por parte de los representantes de los partidos.

Las cuentas se presentaron el año pasado por primera vez fuera de plazo. Pero Mas ha defendido esta mañana en su primera rueda de prensa como portavoz del Consell que lo que ha funcionado en el pasado mejor no tocarlo. Desde la perspectiva de Compromís, la comisión funcionó porque la conocida capacidad de la entonces vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, de forzar las negociaciones hasta el punto máximo hizo que acabaran impresas en el presupuesto todas las exigencias que la titular de Igualdad había planteado.

La propia Oltra lanzó tras el pasado verano la idea de crear la comisión política, a la que sumó Unides Podem, formación a la que tampoco le gustaba la negociación radial que el conseller de Hacienda mantenía con el resto de departamentos y que era la fórmula habitual hasta el año pasado.

Pero hace unas semanas, en una entrevista en la televisión pública, el titular de Hacienda, Arcadi España, se mostró reticente a esta fórmula de negociación. España dijo que la responsabilidad de la Conselleria de Hacienda es hacer una propuesta y trabajarla con el resto de conselleries, es decir el método tradicional. España apela a la responsabilidad que tiene la Conselleria de Hacienda de negociar con el resto y si luego los partidos aportan bienvenido sea pero que el peso de la negociación tiene que llevarlo Hacienda.

Según España todas las conselleries quieren gastar más pero sólo Hacienda tiene una visión global. El titular de Hacienda sostiene que su intención es llegar acuerdos en tiempo (el año pasado se presentaron fuera de plazo), con transparencia para todas las conselleries y dentro del marco y los límites que las cuentas de la Generalitat se pueden permitir. 

Aitana Mas ha reconocido este viernes que ya ha hablado con el conseller de Hacienda, Arcadi España, y que en breve va a mantener una reunión para avanzar ya en las cuentas del próximo año, las últimas antes de las elecciones. Esta mañana ha abogado por sentarse las tres formaciones del Botànic y hablar para marcar los tiempos y las políticas que serán clave para el presupuesto de 2023.

Respecto a la salud del Botànic y al modo de relacionarse los tres partidos en el seno del Consell, Aitana Mas ha remarcado que la guía del gobierno es el acuerdo firmado en 2015 y reeditado en 2019, una hoja de ruta que sirve para hacer políticas de apoyo a la ciudadanía que palíen la situación de emergencia social. 

"Mi manera de funcionar es el trabajo en equipo y se ha hecho así en las Corts Valencianes, soy partidaria de construir puentes y de mantener la mejor relación posible entre los socios", ha dicho. 

Sobre posibles cambios en la Conselleria de Igualdad o la posibilidad de prescindir de los cargos imputados en el mismo caso que provocó la salida de su antecesora, Mas ha dicho que tiene las manos libres, pero que sería imprudente posicionarse en el primer día desde su toma de posesión.