La historia parecía acabada, pero no. La tasa turística vuelve a generar tensiones entre los socios del Botànic. La ley prevista y acordada por los tres partidos que dan apoyo al Consell entrará en el pleno de las Corts la próxima semana, pero sin la seguridad de que salga adelante. Su aprobación la ha dejado en el aire la síndica del PSPV, Ana Barceló, quien ha evitado pronunciarse sobre el sentido del voto de su grupo.

Hasta en cuatro ocasiones ha sido preguntada la portavoz de los socialistas en las Corts por el sentido del voto de los suyos en el pleno 'escoba' que cerrará el periodo de sesiones la próxima semana. En este se ha incluido la toma en consideración de la ley que prevé la implantación de un impuesto a las pernoctaciones turísticas, una norma que, no obstante, sería de carácter voluntario para los ayuntamientos y con una moratoria hasta 2024.

Ha sido en esa moratoria y esa voluntariedad de los municipios en las que se ha comenzado escudando Barceló para evitar exponer el posicionamiento de su grupo. Si minutos antes los representantes de Compromís y Unides Podem han destacado que el pleno serviría para iniciar los trámites parlamentarios de una de las medidas que más chispas, sudores y negociaciones han generado en el Botànic, la síndica socialista ha esquivado mostrar su apoyo tras asegurar que el compromiso de los partidos era "llevar su debate a pleno".

Los socios han exigido la tramitación ahora de la ley y los socialistas han transigido incluyéndola en el calendario parlamentario, según la información recabada por este diario. Sin embargo, para el partido del president Puig, no es el momento de embarcarse en esta norma, cuando la inflación y la subida de precios amenazan los indicadores de la economía.

Así, Barceló ha emplazado la postura del grupo a esperar a una reunión con la Federación Valenciana de Municipios y Provincias para "escuchar" su opinión "respetando la autonomía municipal". "Este grupo todavía no se va a pronunciar", ha señalado la portavoz del PSPV en la cámara autonómica sobre si darán su apoyo a la medida o si, al no votar a favor, la dejarán caer.

El debate de esta proposición de ley en el pleno del día 14 no suponía su puesta en marcha todavía, sino su toma en consideración, un pistoletazo de salida a los trámites parlamentarios para que finalmente viera la luz. Sin embargo, sin el voto de los socialistas la propuesta decaería. El proyecto de ley es fruto de un acuerdo sellado en diciembre con fotografía de los entonces tres síndics del Botànic: Manolo Mata, Pilar Lima y Fran Ferri.

Aquel acuerdo, que deja la tasa turística en un impuesto voluntario de cada ayuntamiento y bonificado al 100 % hasta 2024, mantenía la paz en un tema en el que el PSPV ha mantenido las distancias con Compromís y Unides Podem. No obstante, no todos dentro de los socialistas se mostraron a favor. La voz más disonante ha sido la del secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, que la semana pasada reiteró su rechazo calificando el nuevo impuesto de "error".

La toma en consideración de la norma llega además al pleno de las Corts sin el criterio del Consell. Este no es obligatorio, pero sí habitual. En esta ocasión, la Conselleria de Hacienda ha rehusado emitir su punto de vista sobre el nuevo gravamen.

"Hay que ser coherentes"

"Para Compromís lo único válido es lo que está negro sobre blanco", ha replicado la síndica de Compromís, Papi Robles, tras escuchar las declaraciones de Barceló. Ser el partido más votado da privilegios y el de los socialistas es comparecer los últimos lo que ha obligado a la la portavoz de la coalición valencianista a añadir una nueva intervención. Así, ha insistido en que hay "acuerdos firmados que son muy claros" y ha asegurado que no se podría entender que el PSPV votara "con las políticas de la derecha". "Hay que ser coherentes", ha expresado.

Misma línea defendida desde Unides Podem. Su portavoz de Turismo en las Corts, Ferran Martínez, ha indicado que "no tendría ningún sentido que el Grupo Socialista no diera apoyo a una ley en la que llevamos meses trabajando juntos y que hemos acordado incluir en el pleno". De hecho, ha indicado que "como es habitual" la propuesta para incluir el debate de la ley en el pleno ha sido de la propia Barceló.