El incendio de Bejís entra en su fase final. El Puesto de Mando Avanzado lo dio ayer a última hora del día por «estabilizado» al no quedar ya ningún frente activo, según se pudo comprobar en los vuelos de reconocimiento. La evolución favorable permitió el regreso de los vecinos desalojados en Teresa, Sacañet y las pedanías de Andilla que todavía no habían podido volver a sus casas y la apertura de todas las carreteras.
Sin embargo, el día contó con momentos complicados. Tres eran los frentes que preocupaban: Andilla, Cueva Santa y El Toro, los puntos más calientes de la gran extensión de terreno que ha comido el fuego. Las altas temperaturas de la tarde y el viento provocaron reproducciones. El más preocupante fue en el flanco de Andilla que pudo ser controlada «de forma inmediata» con más de 300 efectivos terrestres y una veintena de medios aéreos.
Esa rápida respuesta permitió terminar la jornada sin frentes activos, sin llama, y en una situación positiva de cara a las siguientes horas. Y es que por la noche se esperaba un descenso de las temperaturas, un aumento de la humedad hasta el 70 % y vientos suaves, condiciones favorables, especialmente en comparación con lo vivido durante las horas centrales del día (y que se prevé que se repita este lunes). Es por ello que Bravo llamó a la «prudencia» y a recordar que el incendio «aún sigue activo».
Así las cosas, ese control del perímetro del incendio, de unos 140 kilómetros, permitió que la superficie quemada se mantuviera estable en torno a las 19.000 hectáreas. Una extensión que equivale al 8 % del terreno sobre el que se extienden las dos comarcas afectadas por el incendio, los Serranos y el Alto Palancia.
La peor parte se la ha llevado la comarca castellonense, que con una superficie de 965 kilómetros cuadrados —equivalente a 96.500 hectáreas— ha visto como el fuego se cebaba con sus poblaciones más occidentales. Aunque los datos satelitales no permiten separar las hectáreas afectadas por cada comarca, las llamas han recorrido el Alto Palancia de norte a sur por ese flanco este, desde El Toro hasta Altura.
Por el contrario, la afectación en los Serranos ha sido mucho más limitada. El fuego ha alcanzado Alcublas y algunas pedanías Andilla.
En mejores condiciones se encuentra el otro gran incendio que afectó a la Comunitat Valenciana la semana pasada, el de Vall d’Ebo. Nueve días y 11.317 hectáreas después, se dio ayer por controlado. Las condiciones meteorológicas de la noche del sábado al domingo permitieron tomar una decisión que se retrasó durante la tarde. El viento y el aumento de las temperaturas provocaron reproducciones «sin importancia», según indicó Puig, pero que atrasaron el avance de fase, la última antes de que se dé por extinguido más de una semana después de que un rayo lo provocara y obligara a evacuar a casi dos mil vecinos de la zona.
Evaluación de daños
Con los dos grandes incendios contenidos, llega el momento del balance de daños. Todavía no hay datos oficiales, pero los primeros análisis que permiten las imágenes satelitales del sistema de prevención de incendios de la Unión Europea muestran el fuego de Bejís como mucho más agresivo que el de Vall d’Ebo, especialmente por su mayor masa boscosa.
Según los datos obtenidos del satélite Copernicus, casi 11.000 de las más de 19.000 hectáreas calcinadas en la zona de Bejís presentan daños «moderados», un 60 % del total. Es el triple que en Vall d’Ebo, donde ese grado de afectación ‘solo’ lo presenta el 20 % de la superficie quemada: 2.353 de las 11.317.
Asimismo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visita hoy las zonas afectadas por el fuego de Bejís y mantendrá un encuentro con responsables del operativo, alcaldes y alcaldesas y reconocerá sobre el terreno los trabajos de extinción. Según informó Moncloa, estará acompañado por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, por el president Ximo Puig y por la delegada del Gobierno en la C. Valenciana, Pilar Bernabé.
