La normativa de la Generalitat en materia de ‘bous al carrer’ en la Comunitat Valenciana es bien clara al respecto y prohíbe taxativamente la participación de menores de 16 años en cualquier tipo de festejo taurino. Así lo recoge el artículo 36 del Reglamento de festejos taurinos tradicionales en la Comunitat de 2015, que dice textualmente que «no se permitirá la participación de menores de 16 años, que, únicamente, podrán acudir como espectadores». El incumplimiento de esta prohibición supone una infracción grave que lleva aparejadas sanciones de entre 600 y 30.000 euros.
A estas sanciones podrían enfrentarse ahora, previa propuesta de sanción mediante y alegaciones administrativas que puedan esgrimir los sancionados, hasta cuatro personas por la participación de dos menores de nueve y diez años en el ‘bou embolat’ de Nàquera el pasado fin de semana, hecho del que informó Levante-EMV. Concretamente se trataría de los padres de ambos menores –aunque uno no se encontraba en el lugar junto a los niños– y los dos peñistas que aparecen en las imágenes ayudando a los pequeños a prender las bolas del toro con una bengala, según ha podido saber este periódico.
Estas propuestas de sanción, cuyo importe final fijará la administración autonómica, –algunas fuentes consultadas hablan de 3.000 euros cada uno por una infracción grave– es fruto de las averiguaciones realizadas por la Policía Autonómica y la Policía Local de Nàquera, quienes tras analizar las fotografías y vídeos de lo ocurrido la noche del pasado sábado apuntan a la responsabilidad de estas cuatro personas adultas.
Las autoridades municipales cancelaron les festejos taurinos de Nàquera tras comprobarse la presencia de estos dos menores en el recinto taurino participando activamente en el festejo del ‘bou embolat’ del pasado sábado cuando dos peñistas preparan al toro y uno de ellos prende fuego a una bengala y se la da a los niños, quienes tras encender una de la bolas huyen tras los movimientos del animal.
Los dos menores, amigos y vecinos de Nàquera, se encontraban acompañados del padre del de nueve años. No obstante, la propuesta de sanción también se va a dirigir contra el padre del segundo, quien pese a no estar presente, supuestamente era conocedor de que su hijo estaba en el ‘bou embolat’.
Condena de las peñas taurinas
La participación de estos dos menores de nueve y diez años en el encendido del ‘bou embolat’ de Nàquera el pasado fin de semana ha causado indignación en las dos peñas taurinas con las que cuenta dicha localidad. La Penya El Cuerno de Nàquera manifestó ayer a través de un comunicado en redes sociales su «más absoluto descontento» ante los hechos acontecidos la pasada noche del 21 de agosto y «aprovechamos estas líneas para condenar lo ocurrido».
Asimismo quisieron aclarar, para evitar confusiones, que la peña ‘El Cuerno’ de Nàquera no era la encargada de organizar el festejo taurino de ese día, por lo que «se desvinculan totalmente de los hechos ocurridos». «Durante la celebración de los festejos de ‘bous al carrer’ nuestra prioridad siempre es el cumplimiento de la normativa vigente, y sobre todo, actuar con total responsabilidad y sentido común por el buen funcionamiento de los mismos», indicaron fuentes de la citada penya de bous al carrer de Nàquera, quienes insistieron en que el incidente con los dos menores ocurrido durante el primer toro embolado de la noche estaba bajo la organización de la otra peña de la localidad. Así consideran que «se incumplió la normativa legal, por lo que nuestra penya, ante tales hechos, y no pudiendo ser de otro modo, manifestamos nuestra condena con lo ocurrido», puntualizaron en este mismo comunicado.
Por su parte, la Peña Taurina de Nàquera también quiso condenar lo ocurrido en otro comunicado. Desde la citada entidad incidieron en que desde la organización siempre se ha cumplido la normativa que impide la participación de menores en este tipo de espectáculos y aseguraron que tanto la presidencia como la junta directiva reiteraron en varias ocasiones que el encendido del toro embolado no se podía celebrar «porque eran menores de edad e incumplían la normativa y la ley».
