El director general del Secretariado y de la Portavoz del Consell, Juan Vicente Santos Cerveró, ha dirigido un escrito a la presidencia del Parlamento Europeo, del Comité de Peticiones y a los representantes de este último organismo europeo para denunciar la "actitud bochornosa" de la presidenta del Comité de Peticiones, la eurodiputada del PP, Dolors Montserrat. Además de las "circunstancias irregulares y no ajustadas a derecho" de la votación que permitió mantener abierta las quejas presentadas por el PP sobre los abusos a menores tutelados en la Comunitat Valenciana.

En el escrito, al que ha tenido acceso Levante-EMV y adelantado por Valenciaplaza, Santos Cerveró denuncia la "inadecuada actuación de la [presidenta de la Comisión de Peticiones] Dolors Monserrat, actuando más en calidad de eurodiputada del Grupo Popular Europeo que como presidenta de la institución, se trató de evitar en varias ocasiones que el representante del gobierno regional tomara la palabra ante el Comité". Al respecto el representante del Consell señala que "inicialmente se nos negó la posibilidad de intervenir contestando a las peticiones efectuadas, puesto que la Presidenta actuó como si no estuviéramos comparecidos, y se tuvo que efectuar la correspondiente protesta como se puede comprobar en la grabación de la sesión". Una situación que se produjo "a pesar de los escritos remitidos durante los últimos meses desde la Generalitat Valenciana, con la correspondiente respuesta del Secretariado de la Comisión de Peticiones".

Igualmente, añade que durante el debate, "se solicitó reiteradamente, y se denegó en tres ocasiones, la posibilidad de efectuar un turno de réplica por este representante regional, ante las reiteradas alusiones de europarlamentarios de distintos grupos. Se efectuaron, sin éxito, las correspondientes protestas".

Sobre la votación, que inicialmente permitía cerrar las quejas sobre los abusos, aunque finalmente se mantuvieron abiertas tras el cambio del sistema de votación decidido in extremis por Dolors Montserrat. "Ante la evidencia de que perdían la votación mediante el voto ponderado, ya anticipado por los coordinadores de grupo, la señora Montserrat no dudó en alterar las reglas del juego al final de la sesión, cuando habían marchado numerosos parlamentarios, y sin que sirviera de nada las múltiples protestas de los distintos grupos representados".

Una decisión que desde el Consell consideran que supone "un uso anómalo y partidista de la presidenta Dolors Monserrat, que retorció la interpretación del Reglamento y alteró el sistema de votación previsto. Fue una actuación de la presidencia de la institución, que se vivió por este representante como bochornosa y propia de instituciones muy poco democráticas, y en la que se pervirtió el modo de votación". Un hecho que Santos Cerveró pone en relación con "la coincidencia, y la poca imparcialidad existente, al coincidir los intereses de la presidenta y de su partido político (el Partido Popular), que es el mismo que el de las peticionarias".