Una concentración en la Plaza de los Pinazo de València recordó ayer a Mahsa Amini, la joven de 22 años que «murió asesinada a golpes» tras ser detenida por la policía de la moral de Irán porque, según ellos, su velo dejaba ver demasiado pelo a la vista.
Las personas que participaron en la concentración recordaban a Mahsa Amini con imágenes, banderas iraníes y carteles en los que se recordaba a la joven «Mahsa Amini. Di su nombre», «Todos somos Mahsa Amini» y se reivindicaba a la «Mujer, vida y libertad», «Help Iran», «Exigimos derechos humanos» y «Be our voice» (se nuestra voz) ante la falta de libertades y respeto a los derechos humanos en la República de Irán, presidida por el clérigo ultraconservador Ebrahim Raisí.
«Las mujeres y los hombres de Irán estamos asfixiados por la opresión de un régimen que denigra a su propio pueblo. Mahsa es un símbolo, la chispa que ha vuelto a inflamar a un pueblo ansioso de libertad», aseguraban los ciudadanos iraníes residentes en València, que han convocado la manifestación, que ha sido apoyada por personas próximas a ellos de la ciudadanía valenciana. Muchas personas convocantes ni siquiera podían mostrar su rostro ante las cámaras de los periodistas que cubrieron informativamente la concentración. Podría suponer un problema para los familiares que aún residen en Irán, por lo que echaron mano de mascarillas o se refugiaban detrás de los carteles que reclamaban más libertades y respeto a los derechos humanos de los iraníes.
«Estos días, en ciudades de todo el país, las mujeres y los hombres iraníes protestan en las calles frente a policías y militares que les disparan, sin remordimientos, a matar», explican las personas convocantes de la concentración. Además, añaden, «la dictadura ha cortado la conexión a internet para que el mundo no vea tanta sangre derramada con su brutal represión».
De ahí que los convocantes recordaran que «el pueblo de Irán necesita que se sepa. Por favor, no nos dejéis solos», reclamaban.
