Aumentar la seguridad de los festejos taurinos es una prioridad para el futuro de los bous al carrer, mucho más desde que este miércoles se produjera la novena víctima mortal de este año en la C. Valenciana, un hombre de 72 años en Almassora. Todos los fallecidos, excepto dos, eran mayores de 50 años, y cuatro de ellos superaban los 70. Las últimas dos muertes han sido hombres de 80 y 72 años. "Todo lo que sea que hagamos para aumentar las medidas de seguridad, nadie puede estar en contra", pide el secretario autonómico de Seguridad y Emergencias, José María Ángel, en declaraciones a Levante-EMV.

El decreto que regula los bous al carrer en la autonomía especifica que al recinto taurino no pueden entrar menores de 16 años, pero no especifica una edad máxima para entrar en la fiesta. Lo único a lo que se hace referencia es a que "no se permitirá la participación de personas que muestren falta de condiciones físicas o psíquicas para intervenir en el festejo", pero en cualquier caso no hay una edad tope. Ese artículo, el número 34 de la sección cuarta, también se refiere a las personas ebrias. En cualquier caso, los voluntarios que se encargan de detectar a esas personas y expulsarlas del recinto no son suficiente para evitar que ese artículo del reglamento se cumpla.

Los peñistas, tras consultar con juristas, creen que podría ser "anticonstitucional" negar entrar a un mayor de 16 al recinto

"La gente que participa en la fiesta y los directores de los festejos deben denunciar frente a las autoridades que una persona que no está en condiciones de estar en el recinto está allí", dice Ángel. El responsable de Seguridad asegura que para limitar la edad se deberá contar con un "dictamen jurídico" para ver si esto fuera posible, pero que entre todos tienen que "minimizar este factor de riesgo, que es la edad" porque "el inmovilismo es detractor de la propia fiesta". "De cualquier manera, hay actividades, como conducir, que a uno no le dejan hacer cuando es joven y que cuando es mayor tiene que examinarse para poder seguir haciéndolo", ejemplifica Ángel.

Limitar la edad, "complicado" jurídicamente

El presidente de la Federación de Peñas de Bous al Carrer, Germán Zaragoza, avanza a este diario que al final de la actual temporada taurina, a finales de año, "es cierto que hay que hacer un análisis" sobre el futuro próximo de los festejos. "Estamos trabajando con José María Ángel para ver si hay algunos puntos en común en los accidentes ocurridos, y hay un punto en común que es la edad. Los fallecidos son casi todos de edad elevada y casi todos son descuidos y despistes de personas que no deberían estar en el festejo", expresa Zaragoza.

Zaragoza dice que es "muy complicado limitar la edad" porque, según dice, lo han estado "estudiando jurídicamente y podría llegar a ser anticonstitucional".

Los peñistas también argumentan que en muchas ocasiones sus voluntarios se ven sobrepasados al ir a expulsar a alguien del recinto. "No es lo mismo que que te saque la policía", dicen. El artículo 36 del decreto regulador indica que "los organizadores podrán solicitar el auxilio del director del festejo cuando se produzca resistencia al cumplimiento" de las prohibiciones. José María Ángel, por su parte, expresa que son "los directores del festejo los que deben denunciar frente a las autoridades" para hacer cumplir la norma.

Nueve muertes

El pasado julio se produjo la primera cogida mortal del año, en Pedreguer. Desde entonces, el verano ha sido un constante reguero de muerte hasta ahora. Un chico de 18 años en Soneja y otro joven de 24 años en Vallada son las dos únicos dos menores de 50 años que han perdido la vida este año en los 'bous'. Hay otros dos hombres que tenían 50 y 56 años, que perecieron en Meliana y Picassent respectivamente. Un turista francés de 64 años fue el trágico protagonista de aquella primera cogida mortal en Pedreguer.

Los últimos cuatro fallecidos son también los de mayor edad, con 71, 73, 74 y 80 años

Los últimos cuatro fallecidos son también los de mayor edad. Los toros han matado a un varón de 71 años en Almedíjar, a otra mujer francesa de 73 años en Beniarbeig y a un anciano de 80 en Canet d'en Berenguer. El último caso, el del vecino de Almassora de 72 años, confirma la tendencia de fallecidos longevos en los 'bous al carrer', que preocupa a la Administración y a los aficionados.