Los dos candidatos que hace algo más de dos años, en el verano de 2020, se midieron a la actual coordinadora de Podem, Pilar Lima, para intentar dirigir el partido morado en la Comunitat Valenciana, Naiara Davó y Fernando Navarro, dan por agotado su ciclo en la primera línea política.
Ninguno de los dos prevé repetir en las próximas elecciones autonómicas o municipales, por lo que cederán el paso a otros militantes, pero los dos saldrán de las instituciones.
Ambos consideran agotado el ciclo que iniciaron como activistas al calor del movimiento 15M que cumplió una década en 2021 y que eclosionó políticamente en 2014 con la irrupción de Podemos y su ascenso en las encuestas hasta convertirse, en los meses finales de ese año, en la formación que lideraba los sondeos electorales en España.
Podemos fue clave en el triunfo de la izquierda valenciana en las elecciones autonómicas de 2015 cuando obtuvo 13 diputados en las Corts. Ya nunca se acercó a esa cifra, que es su techo. En 2019 cayó a ocho diputados y las encuestas le dan ahora cinco para las elecciones de 2023.
No optará a repetir, en su caso en el escaño en las Corts, la exsíndica Naiara Davó (Alcoi, 1987), que ha decidido desmarcarse del proceso de primarias que el partido ha abierto para formar sus candidaturas a las elecciones autonómicas y municipales de 2023. La decisión, que la actual diputada de Unides Podem tiene ya tomada, es la dar un paso atrás en cuanto acabe la legislatura y cerrar el actual ciclo, aunque seguirá ligada al activismo pero desde otros ámbitos.
Concluirá así su presencia en el parlamento valenciano en el que ha sido portavoz parlamentaria entre junio de 2019 y enero de 2021. Desde que Pilar Lima se impuso en el cónclave del verano de 2020, la alcoyana cayó en el ostracismo dentro de su grupo y quedó relegada de las decisiones estratégicas que adoptaba la nueva dirección de Podem. Pocos meses después del triunfo de Lima, el grupo decidió apartar a Davó de la portavocía en las Corts para que la asumiera Lima quien, por cierto, tampoco seguirá en el parlamento valenciano porque ha anunciado que se presenta a las primarias al Ayuntamiento de València.
Davó se resistió todo lo que pudo al cambio de síndica, pero se vio obligada a ceder y replegarse a su escaño en un proceso que fue muy tenso y tiene heridas que aún no se han curado. Desde entonces Davó ha tenido un papel muy secundario en el día a día de Podem. Sus intervenciones en asuntos de calado han sido cada vez menores.
También Fernando Navarro ha anunciado en las últimas horas que finaliza su presencia institucional cuando finalice la legislatura. Navarro no repetirá como candidato a la alcaldía de Castelló por diferencias con Podemos. Aduce agotamiento y señala que no comparte la dirección estratégica del partido morado. Él mismo ha explicado en redes sociales que entre las razones está el agotamiento pero también el progresivo distanciamiento de las decisiones estratégicas de Podemos. Su adiós a las responsabilidades políticas es definitivo, anuncia, aunque asegura que seguirá en el activismo.
El distanciamiento de las decisiones estratégicas del grupo morado está también entre las razones que llevan a Naiara Davó a renunciar a las elecciones primarias.
No es el primer cargo que fue relevante que abandona la primera línea. De hecho todos los que en algún momento han liderado el partido o han optado a hacerlo han acabado por plegar velas. Nunca ha sido posible la integración entre quienes salían victoriosos de un cónclave y quienes caían derrotados.
Ocurrió con el primer líder autonómico de Podem, Antonio Montiel, pero también con quien le sustituyó en el cargo, Antonio Estañ, que también decidió volver a la actividad privada, en su caso la de docente. Y con la exdiputada Fabiola Meco, que optó a dirigir el partido precisamente en el cónclave que ganó Estañ.
Además, en todos estos años han desaparecido de la primera línea política diputados como Sandra Mínguez, Marc Pallarés o Àngela Ballester. Otros, como David Torres o César Jiménez han acabado en cargos de Compromís, un paso en el que podría encajar perfectamente Naiara Davó. Preguntada responde que ella seguirá trabajando para que las formaciones progresistas mantengan el Consell.
Incluso se produjo la salida abrupta de todo un vicepresidente segundo del Consell y conseller de Vivienda, Rubén Martínez Dalmau, que también renunció por discrepancias con Lima hace ahora algo más de un año. Su sustituto, Héctor Illueca, es el único dirigente de Podem que ya ha anunciado que opta a ser el candidato de su partido a las autonómicas.
Tampoco el pulso que enfrentó a Davó y Lima era el primero en el que el partido cambiaba de líder en procesos de grandes tensiones internas. Pese a que la entonces síndica tenía la mayoría del grupo a su favor, compuesto por ocho diputados, la dirección del partido, ya con Lima al frente de la coordinación precipitó la caída.
Desde entonces el ambiente en el grupo parlamentario no ha vuelto a ser el mejor hasta el punto de que periodistas han presenciado en los pasillos de la cámara discusiones entre alguna diputada y la síndica a plena luz y en espacios donde conviven informadores y parlamentarios.
