La tasa de jóvenes que no estudia ni trabaja, los conocidos ‘ninis’, está en sus valores mínimos y ha vuelto a su tasa prepandemia. Por primera vez desde 2015, la cifra baja de 40.000 y revierte una tendencia alcista. De las 360.192 personas de entre 18 y 24 años censadas en la autonomía, son 39.887 las que no se encuentran matriculadas en ningún tipo de estudios oficiales ni cuentan con contrato de trabajo. Un cambio que los expertos explican, principalmente, en el fomento de los grados de formación profesional, una política educativa que ahora empieza a dar sus frutos, junto a un crecimiento en la demanda de empleo.

Según los datos recogidos en el observatorio del mercado laboral elaborado por el Instituto EY-Sagardoy, BBVA Research y la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), el segmento de población que trabaja en la Comunitat Valenciana ha crecido en casi 30.000 personas desde el año 2015, al mismo tiempo que los ‘ninis’ se han reducido en más de 25.000 personas. Esta variación ha propiciado que el porcentaje autonómico pase del 19,57% de 2015 -que superaba la media nacional- al 11,0% del primer semestre de 2022, por debajo del baremo estatal.

“Cuánto tiempo llevábamos escuchando que si no hay mecánicos, fontaneros, electricistas y otros oficios. Los cambios en materia educativa, que suelen ser complejos porque las leyes van cambiando con las legislaturas, se van notando”, explica el director de Adecco Valencia, empresa internacional de trabajo temporal, Víctor Tatay. Esos cambios, asegura Tatay, no son “de una causa-efecto rápida”. “Hoy se ha puesto el esfuerzo en crear la formación profesional mecatrónica (experto en electrónica y mecánica), el grado profesional más buscado en el sector industrial, como por ejemplo en la automoción”, pone en situación Tatay.

El incremento de la demanda de empleo en el último año se ha dado, sobre todo, en empleos de baja cualificación, pero también beneficia a los que ya han cursado, al menos, un grado medio de formación profesional. “El sector logístico, de la última milla, y el industrial también están absorbiendo empleo. Eso sí, para trabajar en la Ford necesitas otro perfil, porque te exige un grado”, explica Tatay.

Sólo el 10 % de 'sisis'

Por lo que respecta a la media nacional, la mitad de los jóvenes del país se dedica exclusivamente a sus estudios. Este sector representa un aproximadamente un 50% del total, frente a los que solo trabajan (en torno al 30%), los que no hacen ninguna de las dos cosas (el 11,2%) o los que, por el contrario, compaginan ambas (menos del 10%). Las conclusiones del estudio reflejan que la proporción de este tipo de jóvenes dentro del grupo de personas entre 18 a 24 años se encuentra en sus valores mínimos mientras que el peso de los que estudian en este grupo ronda sus máximos.