La alerta de Protección Civil para Catástrofes y Emergencias, conocida como ES-Alert o 112 Inverso, se probará hoy en la Comunitat Valenciana, según ha indicado el Centro de Coordinación de Emergencias 112. Este sistema de alerta comenzó a probarse el pasado lunes 24 de octubre en Andalucía, Cantabria y Asturias y hoy, jueves 27 de octubre, es el turno de la Comunitat Valenciana.

La alarma, que sonará como un agudo pitido en el móvil para alertar al usuario de una situación de catástrofe o emergencia, se probará únicamente en la localidad de l'Eliana a partir de las 12.00 del mediodía.

Cómo funciona la alerta de catástrofes

Una vez que finalicen las pruebas y el sistema ES-Alert esté en funcionamiento, las alertas se recibirán en todos los smartphone iPhone y Android de manera automática. Será mediante un sistema de 'pop-up' que hará saltar el pitido y un mensaje asociado en la pantalla de cada móvil. Tanto el sonido como el mensaje sólo desaparecerán cuando el usuario haya leído el texto y pulse aceptar. De esta forma, el sistema entiende que el receptor ha recibido la alerta y se da por enterado.

Para recibir la alerta de Protección Civil para Catástrofes y Emergencias no es necesario instalar previamente ninguna aplicación, sino que el 112 Inverso actuará en todos aquellos teléfonos móviles con sistemas operativos relativamente actuales (no funcionará en terminales que no están considerados smartphone). El pitido llegará a todos los teléfonos que reciban señal de las antenas telefónicas ubicadas en la zona afectada por la emergencia o la catástrofe de la que se advierte a la población.

Es decir, si la situación extraordinaria se produce, por ejemplo, en Cheste, las antenas de telefonía asociadas a este área replicarán el pitido del ES-Alert en todos los teléfonos a los que estén dando señal. De esta forma, se garantiza que recibirán la alerta aquellas personas que puedan verse afectadas por la emergencia debido a que se encuentran físicamente en las proximidades de la zona de la catástrofe.

Así funciona el pitido: un caso real

Quien piense que no va a enterarse de la alerta de Protección Civil, está equivocado (hay que decir que en modo silencioso o vibración no hay sonido, pero sí saltará el mensaje). El pitido es agudo y prolongado, como un timbre que se ha quedado enganchado. De hecho, la reacción habitual es pensar que algo le ha sucedido al teléfono.

Quien escribe lo recibió en julio de este año, durante unas vacaciones que la llevaron a un país extranjero. Un día se produjo un voraz incendio forestal que obligó a evacuar numerosas localidades del área en la que me encontraba.

ES-Alert: el pitido para avisar de catástrofes se prueba hoy en la Comunitat Valenciana.

Aquella tarde estaba en un museo, con centenares de turistas. Fui la primera a la que le sonó el teléfono móvil. Pensé que había entrado un WhatsApp y se había quedado enganchado el sonido o algo similar porque aquello no paraba de sonar. Era un pitido estridente, agudo y persistente.

Al mirar el teléfono, en la pantalla había un mensaje procedente del sistema de emergencias nacional: "Incendio en XXX, cerca de la zona en la que usted se encuentra. En caso de estar próximo al área afectada, evacúe la zona lo antes posible y obedezca las instrucciones de las autoridades". No tenía noticia del sistema de alerta y me sorprendió. Instantes después, los móviles del resto de turistas que se encontraban en el museo comenzaron a sonar casi al unísono. El mensaje era el mismo.

En mi caso, sabía del fuego porque había visto alguna noticia pero sin darle demasiada importancia. Estaba a menos de 50 kilómetros y avanzaba peligrosamente; en apenas unas horas había recortado distancia aunque no llegaba a amenazar la ciudad. El sistema de alerta emitió el mensaje desde todas las antenas de telefonía móvil que estaban a menos de X kilómetros del lugar del siniestro para alertar a la población.

El fuego nunca llegó, pero gracias a este 112 Inverso, tanto los vecinos de aquella ciudad como los miles de turistas que aquellos días estábamos en el lugar, supimos qué sucedía y el posible riesgo aunque no viésemos la televisión, no escuchásemos las noticias o hubiésemos pasado el día dentro de un museo, sin saber qué ocurría en el exterior.