“No existe unanimidad en esta decisión”. La vicepresidenta y portavoz del Consell, Aitana Mas, ha reconocido las diferencias entre los socios del Ejecutivo autonómico sobre el aumento de la bonificación del impuesto de sucesiones a las empresas familiares del 95 % al 99 % sin límite de facturación (ya que ahora estaba en los 10 millones). “Si algún grupo parlamentario quiere incluirlo tiene que ser en las Corts”, ha señalado marcando distancias con una propuesta que un día antes defendía Ximo Puig en la tribuna de la cámara autonómica.
Mas ha tratado de sacudir esta cuestión más allá del Gobierno valenciano y dejarlo en manos de los grupos de las Corts. “Es un debate centrado y enmarcado en las Corts, no en el Consell, y les toca a sus señorías decidir si han de hacer o no enmiendas”, “no le corresponde entrar a valorar a este Consell”, "no existe ese debate en el Consell" o “no voy a entrar en valoraciones del trabajo de los grupos parlamentarios” han sido algunas de sus respuestas intentando alejar el problema del seno Ejecutivo.
Sin embargo, y pese a que en un principio ha alegado que el debate "no existe" en el Ejecutivo autonómico, ha acabado admitiendo que la defensa hecha el jueves en las Corts por Puig de bonificar este impuesto no es compartida por todo el gobierno valenciano. "Lo que puedo decir como portavoz de todo el Consell es que no existe una unanimidad en torno a esta decisión", ha indicado la también vicepresidenta.
En este sentido, ha añadido que la propuesta que los socialistas quieren llevar a las enmiendas de la Ley de Presupuestos para bonificar al 99 % el impuesto de sucesiones en todas las empresas familiares es un tema que “viene de muchos años”, que se ha puesto encima de la mesa “en muchas ocasiones” y que este tema no genera “unanimidad”. Así, ha querido contraponer esta medida con la reforma fiscal aprobada por decreto en la que “sí que hay unanimidad”, como evidenció el pleno de las Corts el jueves.
"Ese es el acuerdo al que hemos llegado”, ha indicado sobre la reforma fiscal dejando fuera de este pacto la bonificación a la empresa familiar al tiempo que ha añadido que la hoja de ruta del Ejecutivo es el pacto del Botanic firmado en 2019. “Esta es la hoja de ruta, todo lo que queda fuera de ese acuerdo hay que negociarlo”, ha indicado. Es a esta negociación a la que apela la vicepresidenta, pero "dentro del parlamentarismo”, intentando alejar cualquier roce de dentro del Consell. “Los grupos tendrán que debatir sobre todo lo que quieran y cambiar lo que deseen”, ha dicho.
"No es leal"
Minutos antes, el secretario autonómico de Hacienda, Francesc Gamero, de Compromís, había incidido en las críticas a la propuesta de los socialistas. Así, ha considerado que no es "leal" que cuando se tenga "un acuerdo sobre una materia (en este sentido, una reforma fiscal), vayas al parlamento y plantees otra cosa que se había descartado". "No es una buena idea", ha indicado al respecto y ha señalado que el impuesto de sucesiones "no impide el relevo generacional de las empresas familiares", uno de los argumentos dados el jueves por Puig. "Un negocio que factura 10 millones al año no tiene estos problemas", ha remarcado.
