Como muchos sabrán, el frío favorece la aparición de catarros y esto tiene una explicación. Según los expertos, los resfriados se expanden mejor en ambientes más frescos y cerrados pero, ¿qué es exactamente la gripe y cómo se contagia?

La gripe estacional es una infección vírica aguda que circula por todo el mundo. Se trata de una infección viral de la nariz y de la garganta que suele provocar, según la OMS: fiebre, tos (a menudo seca), dolor muscular y malestar general. Por lo general es inofensiva, aunque en personas con alto riesgo la gripe o el rinovirus, que es el más común, puede ser una enfermedad grave y a veces mortal. Por ejemplo, se calcula que las epidemias anuales provocan hasta 5 millones de casos graves y entre ellos alrededor de 500.000 se convierten en mortales.

Parecido al coronavirus, tiene una alta incidencia en personas asintomáticas. El período de tiempo transcurrido entre la infección y la aparición de la enfermedad es de 1 a 4 días. Aunque la mayoría de las personas acuden a las clínicas para recibir un diagnóstico, otros virus respiratorios como el rinovirus pueden causar síndromes gripales que dificultan el diagnóstico.

La gripe estacional tiene fácil propagación y se transmite rápidamente en entornos como las escuelas, gimnasios y residencias de ancianos durante el período de invierno. Al toser o estornudar, las personas infectadas dispersan en el aire gotículas infecciosas que luego inspiran otras personas.

La temporada de gripe en Europa acaba de comenzar. En España, por ejemplo, su apogeo es entre la segunda semana de enero y la segunda de febrero. Durante el invierno, las personas pasan más tiempo en los interiores con las ventanas cerradas y sin ventilación. Los días son más cortos y la falta de luz solar conducen a niveles bajos de vitamina D y melatonina.

Los expertos aducen que la entrada al invierno provocará una mayor interacción en ambientes cerrados y eso fomentará una expansión más rápida del virus a pesar del descenso de la incidencia de la gripe en años anteriores.