Ni alarmas de seguridad, ni cámaras de vigilancia, ni puerta blindada. Un cartel plastificado y unas bridas mantiene a raya a los okupas de València que saben que en esa casa no pueden entrar. Aunque sea una vivienda unifamilar de dos plantas y en una buena ubicación de València, esté vacía, sea grande y espaciosa y hasta cuente con patio interior.
Allí nadie puede entrar. Sólo quien vivía allí porque algún día volverá. El cartel lo explica y no deja lugar a dudas. Los vecinos lo saben y en Torrefiel, un barrio de València con altos niveles de okupación, la vivienda lleva vacía más de dos años. Ni tan siquiera han quitado el cartel.
Los vecinos no se la juegan. El mensaje podría tipificarse como delito de odio e incluye una fotografía.
"Me cago en tos tus muertos". Así comienza el mensaje. Sin medias tintas. Y luego explica qué pasará si alguien entra en su ausencia. "Si te pillo entrando en mi casa te mato y te entierro dentro de la casa". Añade un par de insultos y firma, falta de ortografía incluida: "soy gitano herrante matador". Y para cuidar hasta el último detalle, el mensaje incluye la fotografía de una escena violenta.
