Castelló se convertirá este miércoles en el epicentro de la I Cumbre Hispano Rumana, que traerá al Auditori de la capital de la Plana al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y al primer ministro de Rumanía, Nicolae-Ionel Ciuçã, en una muestra del excelente estado de las relaciones bilaterales entre ambos países, que en el 2021 cumplieron 140 años.

Los ministros

Una importante representación de los ejecutivos de ambos países acompañará a los mandatarios. En concreto, asistirán la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; Defensa, Margarita Robles; Agricultura, Luis Planas; Sanidad, Carolina Darias, y Política Territorial, Isabel Rodríguez.

Por parte del país del Este asistirán Bogdan Aurescu (AAEE), Angel Tîlvãr (Defensa Nacional), Attila Cseke (Fomento, Obras Públicas y Administración), Marius Budãiă (Trabajo y Solidaridad Social), Alexandru Rafila (Sanidad) y Petre Daea (Agricultura y Desarrollo Rural). Con la cita se da cumplimiento a un compromiso sellado en el 2013 y que hasta ahora no se había materializado.

Acuerdos bilaterales

Esta cumbre se considera un hito histórico en las relaciones entre ambos países, socios en la Unión Europea y en la OTAN. Además de la reunión entre Sánchez y Ciuçã, se firmarán diferentes acuerdos entre los ministros españoles y rumanos en materia de salud, trabajo, cultura, asuntos exteriores o agricultura y desarrollo rural.

Ucrania

Igualmente, se abordarán temas de interés mutuo, como el apoyo a Ucrania desde la Unión Europea y la OTAN. Rumanía es un país fronterizo por el que han pasado 2 millones de refugiados ucranianos, de los que han permanecido 90.000 mientras que España ha acogido a más de 150.000.

Socia estratégica y amiga

El primer ministro rumano, Nicolae-Ionel Iuçã, señaló que la reunión conjunta de los Gobiernos de Rumanía y España marca un momento de «enorme valor simbólico». «Más allá de ser una socia estratégica, España es también una amiga cercana de Rumanía», aseveró el mandatario, quien resaltó: «A lo largo de los años, hemos conseguido construir una relación basada en la confianza mutua, en un diálogo político sustancial y dinámico y en un enfoque constructivo y abierto. Tenemos una cooperación económica y sectorial dinámica y diversa. Rumanía y España también tienen enfoques similares en varios expedientes estratégicos en el contexto de la UE y de la OTAN». Además, añadió el primer ministro de Rumanía «nuestros lazos son aún más estrechos gracias a una comunidad muy fuerte, bien integrada y muy activa de casi un millón de rumanos que contribuyen al desarrollo de la sociedad y la economía del Reino de España».

Relaciones comerciales y económicas

Las relaciones comerciales entre España y Rumanía se han intensificado, pasando de los 200 millones de euros anuales de intercambio en los 90 a los 4.200 millones en 2021, sumando importaciones y exportaciones. Asimismo, las empresas españolas han conseguido contratos por valor de 4.000 millones de euros en Rumanía en el periodo 2007 y 2022.

Peso de la comunidad rumana

Según fuentes gubernamentales en España residen 1,1 millones de rumanos, si bien el padrón habla de más de 600.000, la mayor comunidad extranjera del Estado. La Comunitat es, tras Madrid, la segunda autonomía con más expatriados rumanos. La elección de Castelló como sede es considerada por las asociaciones de expatriados como un reconocimiento a la gran comunidad rumana de la provincia, con 36.743 empadronados y que lleva ya asentada desde finales de los 90 y está perfectamente integrada, tanto a nivel educativo, como laboral o social. Si en 1998 había algo más de 150 empadronados del país del Este en 2012 llegó a haber 57.129. 

En Castellón ya hay rumanos de segunda y tercera generación y parejas mixtas. Quienes llegaron hace más de 20 años tienen hijos que se han titulado por las universidades españolas o que estudiando doctorados o másteres. Hay empresarios, abogados, farmacéuticos o ingenieros, profesores, e incluso personas que han accedido a cargos públicos. Además, en centros educativos de la provincia se imparten clases de lengua y cultura rumana. Otros han contribuido con sus negocios a dar vida a los pueblos del interior y a mantener aulas abiertas.

Todo ello refleja una convivencia entre personas con cultura de raíces comunes. El encuentro se produce cerca de una simbólica fecha, el Día Nacional de Rumanía, el 1 de diciembre, y en Castelló, hermanada con Tãrgoviste.

Acercamiento

Mireia Iuliana Bondoc, de la asociación Arrels señala que la cumbre hispano rumana es «lo máximo que podía vivir cualquier comunidad que pueda vivir fuera de su país. Se trata de un acercamiento entre dos culturas a todos los niveles, tanto político como social o cultural. Es un gran honor de sentirnos importantes en la comunidad que nos ha acogido con tanto calor y hospitalidad».

Doble nacionalidad

Por su parte, Manuel Paduraru, presidente del Instituto Hispano Rumano, señala que el hecho de que la cumbre se celebre en la provincia es un reconocimiento a la gran comunidad rumana que hay en este momento en Castellón y fruto de su larga trayectoria, que se remonta a los años 90. «Sería interesante que en ella se tratara el tema de la doble nacionalidad, si se pudiera llegar a un acuerdo para que existiera un tradado, porque sin tener la nacionalidad española no podemos acceder a determinados puestos de trabajo; aparte, no podemos votar en nacionales o autonómicas o presentarnos a algún cargo nacional o autonómico», señaló Paduraru, quien hizo historia al convertirse en el primer concejal rumano de Castelló.

Estrechar lazos

Luciana Gerbanescu, presidenta de la asociación Arie (Asociación Rumana Integración) ve «histórico que se celebre la primera cumbre Hispano Rumana y en Castelló. Nos alegra mucho. Nos ayudará a estrechar más los vínculos entre Rumanía y España, colaborar unos con otros y da más visibilidad».