Una masa de aire polar traerá el invierno el fin de semana

Las altas temperaturas de noviembre y diciembre, con el año más cálido en siglo y medio, darán paso en los próximos días a un ambiente ya propio del invierno. La entrada de una masa de aire polar bajará los termómetros este fin de semana en toda España, según las estimaciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) con la cota de nieve situada en los 600-800 metros en el norte y los 1.200 en el sur. Adiós, pues, a las imágenes de bañistas en las playas del litoral valenciano.

La irrupción fría podría recrudecerse a partir del lunes y martes, con nevadas importantes en los principales sistemas montañosos. Con gran parte de Europa afectada por ese brusco descenso térmico, la situación en España estará supeditada al anticiclón, que podría empujar el aire más frío hacia el este. Solo el sur de Iralia esquivará el fenómeno. Así lo apuntaba ayer Samuel Biener, del laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante.

Biener, experto de Meteored, avanza que a partir del sábado el chorro polar mostrará «importantes ondulaciones». «El domingo un sistema frontal más activo atravesará la Península de oeste a este, con lluvias en gran parte del territorio y con una cota de nieve que descenderá a los 1.200 metros en puntos de montaña del centro y del norte», explica. Aún es pronto para predecir con exactitud cómo afectará esta inestabilidad a la Comunitat Valenciana, remarca Biener, «aunque con la previsión de ahora la bajada de las temperaturas será más acusada en el interior». La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) señalaba ayer que el ambiente invernal que afectará a toda la península no se extenderá más allá de dos o tres días.

De entrar aire del ártico se daría el primer «latigazo» invernal, aunque la incertidumbre es grande aún

«Frente a la llegada del aire polar, la entrada fría se podría agudizar a partir del lunes o martes, ante la posibilidad de que la dorsal atlántica se oriente de sur a norte de forma más enérgica, mientras que una gran vaguada con varios centros de bajas presiones en superficie se situarían sobre Europa, lo que propiciaría la formación de un pasillo de nortes muy marcado, en cuyo caso ya hablaríamos más bien de una masa de aire de procedencia ártica», señala Biener. De ocurrir así se daría el primer «latigazo» invernal, aunque incide en que la variabilidad de los modelos provoca «gran incertidumbre» aún.

Ese descenso térmico de la atmósfera debería reflejarse también en la temperatura superficial marina, que en noviembre y diciembre ha registrado las anomalías positivas más altas desde 1982 para esta época del año. El Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo El Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo certificaba que en algunos puntos de la cuenca se han registrado valores promedio de 1,6 º C. Datos «muy preocupantes» según Samira Khodayar y Francisco Pastor Guzmán, investigadores del CEAM.