Del febrero más gélido en un lustro a temperaturas de junio

La Aemet avanza que a finales de semana se superarán los 30 grados por la entrada del viento de poniente, que irá aumentando su intensidad

La playa de la Malva-rosa, un lunes por la mañana con gente disfrutando del sol. | FRANCISCO CALABUIG

La playa de la Malva-rosa, un lunes por la mañana con gente disfrutando del sol. | FRANCISCO CALABUIG / M.mínguez calabuig. valència

Minerva Mínguez

Minerva Mínguez

Del febrero más frío en un lustro, al marzo más caluroso de los últimos años. El viento de poniente disparará los termómetros en los próximos días y según la Agencia Estatal de Meteorología de la Comunitat Valenciana podrían superar incluso los 30 grados. La previsión apunta a un aumento progresivo hasta alcanzar el próximo fin de semana máximos históricos en una primera quincena de marzo. En los próximos días se pasará de un ambiente plenamente invernal, con los días más gélidos de los dos últimos años, a registros medios típicos de principios de junio.

Desde la Aemet se incide en que el análisis particular de los observatorios de las capitales permite afirma que poco frecuente superar los 30 ºC en la primera mitad del mes. Desde 1869, remarca, nunca se ha superado esa cifra. Habría que remontarse al año 1988, donde un 25 de marzo el mercurio se disparó hasta los 33,2 ºC en València. Ese mismo día en Alicante se quedaban en 32,6 ºC. Una situación similar se vivió en 2015 y 2017, cuando en la misma ciudad se alcanzaban los 32,5 º C un treinta de marzo.

El aire, procedente de latitudes bajas de zonas atlánticas del hemisferio norte, ya de por sí cálido en origen, sufrirá dos calentamientos sucesivos en su descenso desde la meseta hasta el nivel del mar. El poniente será más intenso en las horas centrales del día, cuando puede oscilar entre los 40 y 50 km/hora en zonas abiertas y expuestas a ráfagas del oeste. Un situación que puede tener cierta adversidad para la plantà de las Fallas, tal como recalcan desde la Aemet.

A unas semanas de entrar en la primavera, lo cierto es que el invierno térmico se ha acortado diecisiete días en el territorio valenciano, tal como adelantaba hace unos días Levante-EMV. Si entre 1960 y 1979 el último día de frío se situaba a principios de marzo, en los últimos veinte años la Aemet lo fija en el 20 de febrero. La reflexión sobre los inviernos más cálidos la hacía Aemet en plena ola de frío el pasado 18 de enero, cuando los termómetros llegaron a desplomarse hasta los doce bajo cero el primer día de ola polar en puntos como Bocairent con nevadas de medio metro en el interior.