Este lunes estrenaremos estación con el equinoccio de primavera en el hemisferio norte. En la Península arrancará a las 22:24 pm, mientras que en las Islas Canarias lo hará una hora antes. La hora exacta es resultado de los cálculos realizados por el Observatorio Astronómico Nacional, de ahí que cada año sea diferente. 

Los equinoccios, tanto de primavera como de otoño, son momentos del año en los que nuestra estrella se sitúa en el plano del ecuador celeste. El día y la noche tienen la misma duración y todo ello es por la posición e inclinación de la Tierra respecto al Astro Rey. También a partir del lunes los días serán bastante más largos. 

La primavera es una de las estaciones que más cambios nos trae en nuestro entorno natural. En cuanto a la meteorología, la primavera es una estación cambiante. Por lo general, si se piensa en esta estación, nos vienen a la mente las camisetas de media manga, los almendros, los cerezos y otros árboles en flor y, por supuesto, los días dominados por el sol. Lo cierto de la primavera es que los meses que la componen destacan por ser lluviosos y la naturaleza adquiere una tonalidad y color especial.

El pasado 1 de marzo comenzamos a escuchar que la primavera climatológica ya había comenzado. Lo cierto es que no son lo mismo. La climatológica tiene en cuenta estadísticas y variables como la temperatura y la precipitación. En cambio, desde el punto de vista astronómico, la llegada de la primavera únicamente nos señala la inclinación de la Tierra respecto al Sol. 

La primavera astronómica permanecerá con nosotros 92 días y 18 horas hasta el inicio del verano el 21 de junio. En el campo de la astronomía, las estaciones astronómicas son más variables, ya que pueden caer en diferentes días del año. En el siglo XXI, el inicio más temprano sucederá en el año 2096, mientras que el más tardío fue en 2003. En cambio, la climatológica permanecerá con nosotros tres meses exactos, desde el 1 de marzo al 1 de junio. ¿Lo sabían?