UGT reclama retrasar la aplicación del requisito lingüístico a funcionarios

El sindicato presenta alegaciones al decreto para que no se aplique en la OPE de 2023 y alerta de problemas de los aspirantes para conseguir el certificado de la Junta Qualificadora

Mateo L. Belarte

Mateo L. Belarte

El requisito lingüístico vuelve a ser protagonista a las puertas de las elecciones. El decreto que regula la acreditación de las competencias en valenciano para acceder a un empleo público en la Generalitat y que establece que los altos funcionarios deberán certificar un nivel C1 (equivalente al antiguo mitjà) va a ser alegado por UGT, según acaba de anunciar el sindicato, que reclama ampliar el periodo transitorio antes de poner en marcha estas exigencias.

Las peticiones son básicamente dos: extender el plazo de exención del requisito para los grados más altos (los A1 y A2, que son los que necesitan el C1 con el nuevo decreto) de 2025 a 2027 y no aplicarlo a la convocatoria de Oferta Pública de Empleo (OPE) de 2023, que será convocada de manera inminente.

UGT considera oportuno ampliar ese periodo transitorio para "eliminar la posible incertidumbre" generada para quienes aspiran en la actualidad a una oposición en torno a la acreditación del requisito, la homologación de estudios o la prueba de nivel de valenciano previa a los exámenes.

Según explican desde la central sindical, la elevada demanda para inscribirse en los exámenes de valenciano de la Junta Qualificadora complica a las personas aspirantes el poder conseguir este título acreditativo para presentarlo en los procesos de selección inminentes.

Doble alegación

En concreto, respecto al periodo transitorio para el acceso a los subgrupos de titulación A1 y A2 de personal funcionario y los grupos A y B de personal laboral, UGT solicita que la exigencia de acreditación del valenciano se haga efectiva en las pruebas selectivas que se convoquen a partir de la Oferta de Empleo Público de 2027, es decir, dos años más que lo previsto en el actual borrador.

Además, se demanda a la Generalitat un incremento en los ejercicios de 2023 y 2026 de la oferta de plazas en los distintos organismos oficiales para la obtención del certificado de nivel de valenciano. Desde la entrada en vigor del decreto y hasta finalizar el periodo transitorio, la competencia lingüística para estos grupos será la titulación equivalente a B2.

Por otro lado, el sindicato pide una modificación en la disposición transitoria segunda sobre los procedimientos de selección y provisión en trámite para que se rijan por la normativa anterior los procesos selectivos derivados de las ofertas de empleo público cuyo decreto o norma reglamentaria se haya publicado pero que no haya sido convocado.

Igualmente, se pide la aplicación para las bolsas de provisión temporal que se constituyan con la gestión de los procesos anteriores a la vigencia del presente decreto, así como los que se encuentren en trámite. El sindicato considera que la previsión de la Generalitat de aplicar ya el requisito en la próxima OPE de 2023 es apresurada y podría perjudicar a personas aspirantes.

Por otro lado, UGT solicita que el personal laboral de funciones sanitarias (medicina y enfermería) de los consorcios sanitarios Hospital General de Castelló y el de València queden incluidos, al igual que el personal estatutario de Sanidad, en el artículo 2, apartado 3.

Funcionarios de la Agencia Tributaria, en una imagen de archivo.

mateolopez@epi.es / GUSTAVO VALIENTE / AGENCIAS

Además, en sus alegaciones UGT solicita a la Generalitat copia de los informes de la comisión de competencia lingüística para conocer el estudio y las propuestas que han servido de base para el decreto. También insta a la Conselleria de Educación a realizar las actuaciones necesarias para ofertar un número de plazas suficiente para dar cobertura a todas las personas que quieran certificar su nivel. Para el conjunto de los empleados públicos, se pide una oferta formativa a través de acciones o pruebas con evaluación continua y prueba final para poder actualizar los nivles de conocimiento del valenciano a los nuevos sistemas.

Por último, el sindicato considera un avance la propuesta trasladada por la Administración en la pasada mesa técnica sobre la puesta en marcha de pruebas previas a la celebración de los procesos selectivos para que los aspirantes que no tengan certificado de competencia lingüística puedan demostrarla y que, una vez superada, les sea certficada. Ahora bien, desde UGT se advierte que esta fórmula podría resolver parte de la disfución en el ámbito de la Generalitat, pero no en el conjunto de las administraciones públicas afectadas.