Las multas por exceso de velocidad se disparan hasta ser 100.000 más que en 2021

Las tres provincias registran más infracciones, aunque Alicante y Castellón registran las subidas más llamativas

Aumentan las multas de velocidad en estos radares de València

V. Rodríguez

Los valencianos corrimos demasiado al volante en 2022. Tanto como para hacérnoslo mirar, ya que ni las autovías son el Ricardo Tormo ni los conductores somos Fernando Alonso o Daniel Holgado. Las multas por exceso de velocidad en la Comunitat Valenciana se dispararon a niveles alarmantes el pasado año: fueron 69.806 más que en 2021 en los radares fijos y 33.456 en los radares móviles, según los datos que ha hecho públicos este mes la Dirección General de Tráfico. Ambos números, comparados con la misma estadística pero del año 2021, suponen aumentos significativos del 30 %. Es decir, los radares de la DGT echaron humo el año pasado y las carreteras se convirtieron en lugares más peligrosos, pues el exceso de velocidad es, según Tráfico, la tercera causa de accidentes mortales sobre el asfalto.

Según la aplicación de aviso de radares Coyote, que elabora cada año un informe sobre la presencia de radares en España, el incremento de radares en todo el país fue del 7 % en 2022, lo cual explicaría parte del aumento en las multas al existir más puntos de control. No obstante, respetar la velocidad límite depende del conductor, haya o no haya radar de por medio. Y la prueba de que no anda la cosa como para buscar excusas es que las multas a conductores en la C. Valenciana han crecido diez puntos porcentuales más que en la media del país, que ha experimentado una subida del 21 % en las infracciones castigadas por la DGT (ha habido 3,7 millones de multas por exceso de velocidad en toda España). El año 2021, ya prácticamente sin restricciones por covid durante la inmensa mayoría del año, las cifras de multas ya fueron similares a las de 2019, antes de la pandemia. Este 2022, las tres provincias valencianas han superado por mucho las cifras registradas en el año prepandemia.

Por provincias, el dato que más llama la atención es el del aumento de infracciones de velocidad que se ha producido en Castellón. En las comarcas del norte ha habido un 53 % más de multas dictadas por los radares fijos y móviles, 32.053 más, en concreto. Solamente los fijos pusieron 54.148 ‘tickets’, mientras que los móviles pusieron 38.060.

La provincia de Alicante figura en segundo lugar en cuanto a porcentaje de incremento, al registrar 32.068 multas más que en 2021, un 35 % más. Los radares fijos ‘pillaron’ a 89.231 vehículos y los móviles, a 34.642. 

El aumento en la provincia de Valencia es menor (de un 20 %) si bien al ser la provincia más poblada de la autonomía es la líder en cuanto a número de multas por exceso de velocidad. En total ha habido en las comarcas centrales 231.389 multas por este motivo, 156.006 de las cuales recogidas por los radares fijos y 75.383 por los móviles.

Aparte está el resto de las multas, siendo algunos de los clásicos aún los más sancionados en la autonomía: circular sin haber pasado la ITV supuso una multa en 82.633 ocasiones; ir sin el cinturón todavía provoca 11.863 multas en la Comunitat Valenciana; conducir con el teléfono en la mano fue sancionado como infracción 10.286 veces; circular sin seguro penalizó a 9.929 valencianos; y los controles de alcoholemia también cazaron a 8.781 personas.

El tercer radar que más multa de España está en Valencia

Los radares de la DGT en la Comunitat Valenciana son los segundos más activos, tras Andalucía, al formular 447.470 denuncias en 2022, el 12 % del total, según revela un estudio realizado por la organización de defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA). El radar que más multas pone de toda la autonomía valenciana -y el tercero de todo el país- es el del kilómetro 326 de la A-7, en el bypass, a la altura de la Canyada (Paterna). Este radar es todo un clásico de este tipo de ránkings. En 2022 'cazó' 50.387 infracciones. En la decimoséptima posición nacional aparece el radar de la V-31 en su kilómetro 5,2, que puso 29.916 multas.

En total, más de 1.000 radares de la Dirección General de Tráfico (DGT) formularon casi cuatro millones de denuncias en 2022 en España, lo que supone un incremento del 21,2% respecto al año 2021. En este sentido, el estudio constata que los radares más activos se han localizado en Andalucía, con 953.422 denuncias formuladas (el 25,7% del total); seguido de la Comunitat Valenciana, con 447.470 (12%) y Castilla y León, con 427.448 (11,5%), mientras que los radares situados en La Rioja (39.757), Navarra (83.231) y Asturias (83.993) son los que menos denuncias contabilizaron.

En concreto, el radar más activo de España --que el año pasado no se encontraba entre los 50 más activos-- se ubica en el kilómetro 74,7 de la A-381, a la salida del túnel de Valdeinfierno, en el término municipal de los Barrios (Cádiz), con un récord de 79.258 denuncias.

El estudio también destaca que sólo 50 radares de los más de 1.000 que dispone la DGT, formularon el 28% del total de denuncias (1.036.054) y que, de ellos, 33 ya aparecían en el ranking de cinemómetros más activos del año anterior.

Por otro lado, la AEA ha advertido sobre los radares que han incrementado "exponencialmente" su actividad y ha puesto como ejemplo el radar situado en el kilómetro 37 de la A-381, (Autovía Jerez-Los Barrios) en el término municipal de Alcala de los Gazules (Cádiz), que ha pasado de formular 17.666 denuncias en 2021 a 68.321 en 2022.

Mientras, los radares situados en el kilómetro 53 de la M-40, en Madrid y en el kilómetro 42,2 de la GC-1, en Las Palmas de Gran Canaria, han experimentado subidas de más de un 200% y de un 100%, respectivamente.

"La DGT debería replantearse su política de radares, ya que no se está consiguiendo el objetivo de evitar los excesos de velocidad, ni los accidentes, convirtiendo los radares en meros instrumentos de recaudación", ha detallado el presidente de la AEA, Mario Arnaldo, tras conocer que el número de denuncias formuladas son "mayoritariamente" en autopistas y autovías y no en las carreteras secundarias donde se producen el 70% de los accidentes con víctimas.