Multan con más de un millón de euros a un conductor por un cerdo muerto en su furgoneta en Torrevieja

La Guardia Civil ha denunciado en Torrevieja al conductor de una furgoneta que transportaba en el maletero de su furgoneta un cerdo muerto cuyo origen ni estado sanitario pudo acreditar. El vehículo no se encontraba habilitado para el transporte de carne para consumo humano y el animal fue intervenido para su destrucción al no tener documentación alguna sobre su origen y estado sanitario.

La intervención del cerdo se produjo el pasado 12 de mayo durante un dispositivo de prevención de la seguridad ciudadana en la autopista AP-7 a la altura de Torrevieja. Agentes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (USECIC) de Torrevieja detectaron un bulto sospechoso en el maletero de una pequeña furgoneta y comprobaron que se trataba de un cerdo muerto, cuya carne iba a ser destinada para el consumo humano.

Una patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Guardamar se personó en el lugar y confirmó que se trataba de un cerdo doméstico. El conductor no pudo acreditar el origen del animal, ni el estado higiénico sanitario del mismo, careciendo de prueba veterinaria alguna.

Sin medidas higiénicas

Además, el animal estaba siendo trasladado en un vehículo que incumplía las medidas técnicas e higiénico sanitarias, lo que supone un riesgo potencial para la salud pública.

Los investigadores denunciaron al conductor por varias infracciones, dando cuenta de ello a la Conselleria de Sanidad. Estos hechos pueden conllevar sanciones económicas de hasta 1.200.000 euros, según la Guardia Civil.

Una vez formalizada la denuncia, una empresa retiró el cuerpo del cerdo para su posterior destrucción y la Guardia Civil continúa con las investigaciones para averiguar la procedencia del animal.

El Seprona ha logrado evitar que esta carne acabara "destinada al consumo humano, llevando a cabo las funciones para prevenir, controlar y erradicar enfermedades animales, mejorar la sanidad de los animales y sus productos, proteger la salud humana y animal, y prevenir riesgos para la salud derivados del consumo de productos de origen animal", informa la Comandancia de Alicante.