La DANA afecta a 4 de cada 10 valencianos vulnerables

Llueve sobre mojado para la población más vulnerable de la Comunitat Valenciana. Según los datos que ofrece el Gobierno, en los 75 municipios de la provincia de Valencia que han sufrido daños por las devastadoras inundaciones desencadenas por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) del pasado 29 de octubre residen cerca de cuatro de cada diez (el 38 %) personas beneficiarias del Ingreso Mínimo Vital (IMV) o de pensiones no contributivas por invalidez o jubilación.

La cifra la dio ayer la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, quien en una entrevista en Las mañanas de RNE, señaló que en los municipios afectados por la DANA en la Comunitat Valenciana viven «más de 100.000 perceptores de ingreso mínimo vital o de prestaciones no contributivas, que son las pensiones más vulnerables». «Automáticamente van a ver incrementado un 15 % dicha prestación, sin tener que hacer ningún trámite. Queremos facilitar al máximo esta situación», añadió.

De estas 100.000 personas consideradas población vulnerable, 10.564 cuentan con una pensión no contributiva por incapacidad (3.655) o por jubilación (6.909) según los datos del Imserso facilitados por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 que dirige Pablo Bustinduy. El departamento de Saiz no concretó ayer las cifras de beneficiarios del IMV residentes en los municipios afectados por las inundaciones, pero rondarán las 89.500 personas.

Ambos ministerios publicaron ayer los últimos datos de beneficiarios del IMV y de pensiones no contributivas, correspondientes al mes de octubre. En la Comunitat Valenciana son un total de 261.974 personas; de las cuales 211.645 perciben el IMV y otras 50.329 pensiones no contributivas por invalidez o jubilación.

En riesgo de pobreza

Por tanto, los 89.500 perceptores del IMV que viven en los 75 municipios con daños por la DANA representan 9 de cada 10 (el 93,5 %) de los beneficiarios de esta prestación en la provincia de Valencia (95.647 personas). Hay que recordar que el Ingreso Mínio Vital está dirigido a prevenir el riesgo de pobreza y exclusión social de personas que carecen de recursos económicos para cubrir sus necesidades básicas.

Este colectivo vulnerable está compuesto principalmente por población urbana y, por tanto, vive en áreas densamente habitadas alrededor de las grandes ciudades. Gran parte de los municipios afectados por la DANA pertenecen al área metropolitana de València, lo que explica la alta proporción de beneficiarios del IMV en los pueblos y ciudades con daños por las inundaciones.

Sin ir más lejos, l’Horta Sud, que está en la zona cero de la catástrofe, es la comarca de la provincia de Valencia con mayor proporción de personas residentes en hogares con carencia material y social severa: un 8,2 % del total de sus habitante, según los datos de la Encuesta de Condiciones de Vida de 2023 analizados por el Institut Valencià d’Estadística (IVE), lo que se traduce en cerca de 40.000 personas.

En cuanto a las pensiones no contributivas, los datos del Imserso establecen que 4 de cada 10 preceptores de esta pensión mínima en la provincia de Valencia residen en municipios con daños por las inundaciones, lo que equivale a una quinta parte del total de pensiones no contributivas de la Comunitat Valenciana