Argüeso, un camaleón político detrás de la descoordinación de la emergencia

El secretario autonómico, en el punto de mira junto con Mazón y Pradas por la gestión previa y posterior a la DANA, es un ex guardia civil y policía local con fama de ‘fontanero’ al servicio del PP

Argüeso, un paso por detrás de Salomé Pradas, ataviado con el chaleco rojo de Emergencias.

Argüeso, un paso por detrás de Salomé Pradas, ataviado con el chaleco rojo de Emergencias. / EFE

Teresa Domínguez

Teresa Domínguez

Descoordinación. Descontrol. Desorganización. Desconocimiento. Desorden. El prefijo des, recuerda la Real Academia de la Lengua, «denota negación o inversión del significado de la palabra simple a la que va antepuesto». Eso, haber hecho lo contrario de lo que se esperaba es lo que parece haber ocurrido con los responsables de Emergencias ante la peor catástrofe natural (y más anunciada: los medios de comunicación, Aemet y hasta las decenas de aplicaciones meteorológicas de los móviles llevaban advirtiendo de la seriedad de esta DANA desde el domingo anterior) que ha sufrido jamás la C. Valenciana. 

Al margen de la actuación de Carlos Mazón como presidente autonómico y máximo responsable de cada una de sus competencias, y de su consellera del ramo, Salomé Pradas, el siguiente nombre en el escalafón es el de Emilio Argüeso, secretario autonómico de Emergencias, nombrado personalmente por Mazón, con el que comparte amistad desde hace años por filiación política y origen, el pasado 12 de julio, tras la brusca salida de Vox del Gobierno autonómico. 

El partido ultra tenía en sus manos la conselleria de Justicia e Interior, así que ese día el president la reasignó a Salomé Pradas como consellera y metió a Argüeso en Emergencias, tras sacarlo de Sistema Sociosanitario, secretaría autonómica que le había asignado nada más ganar las elecciones de mayo de 2023. 

Un apunte, todos los analistas vieron en aquel nombramiento el gesto de agradecimiento de Mazón por la labor de fontanería de Argüeso frenando en el último momento el apoyo de Ciudadanos -partido del que ya era ex, pero en el que conservaba fuertes influencias- a la iniciativa del Botànic para rebajar del 5 al 3 % el listón electoral. El PP se aseguró de que no entrase Podem y eso fue una de las claves para desbancar a la coalición de izquierdas. 

¿Quién es Emilio Argüeso?

Nacido en Alicante en 1969, hizo la mili en la Guardia Civil y a los pocos meses, en 1991, entró en el Cuerpo aprobando la oposición. Aguantó 14 años y en 2005, tras pasar casi toda su carrera profesional en el Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona), colgó el uniforme y el salario de guardia para irse de jefe de la Policía Local a Archena, primero, y a Totana, ambas en Murcia, después. Entre tanto, tuvo tiempo para estudiar varios grados en la Universidad Miguel Hernández de Elx, municipio donde tiene su domicilio. 

Su querencia por la política le llevó a militar unos meses, pocos, en las Juventudes Socialistas, aunque pronto se pasó al Partido Popular y de ahí a UPyD. Después saltó a Ciudadanos como secretario de Organización hasta que fue expulsado de la formación en 2021, aunque se pasó al grupo mixto para quedarse con el escaño de senador hasta acabar, de nuevo, en el Partido Popular completando el periplo por buena parte del arco iris político, con especial inclinación por el centroderecha.

Y llega la DANA. Criticado por su ausencia en las horas previas e inmediatamente posteriores a la catástrofe (la tarde del diluvio y la riada tenía una reunión de festejos taurinos y no se incorporó a la emergencia hasta las 11.00 horas del miércoles, según dijo él mismo), lo cierto es que ha estado ausente desde el primer momento de los focos mediáticos. Intencionado o no, no se ha dejado ver. ¿Perfil bajo ante la otra lluvia que se barruntaba, la política?

Esa ausencia no solo ha sido ante los focos. Como secretario autonómico de Emergencias es el máximo responsable de distintos organismos directamente implicados en la gestión de cualquier situación crítica, desde la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a la Emergencia (Avsre), que dirige, al Ivaspe, pasando por la coordinación de todas las policías locales de los municipios valencianos, casi 8.000 agentes a su disposición. Ni él ni su negociado han conseguido, sin embargo, coordinar toda esa fuerza disponible. Al contrario. 

Argüeso, que se jactó tras su nombramiento al frente de Emergencias con un «esto es lo mío» en referencia a su pasado policial, es el presidente de la Comisión de Coordinación, el «máximo órgano de participación institucional, consultivo y deliberante» de la Policía Local, formado por él, un vicepresidente y 24 vocales: ocho alcaldes, cuatro jefes de Policía Local cuatro funcionarios de la Generalitat Valenciana y ocho representantes de sindicatos policiales.

Sin listado actual de teléfonos

La primera vez que ha convocado esa comisión, tras sustituir a uno de los jefes de Policía Local, el de Onda, por un hombre de su plena confianza, amigo personal suyo, el jefe de Elx, César Zaragoza, fue el pasado 25 de octubre. Cuatro días antes de la DANA. Lo hizo para tratar el futuro carné profesional de Policía Local en la C. Valenciana. Zaragoza no estuvo presente, pero sí Argüeso. 

También el alcalde de Algemesí, José Javier Sanchis Bretones, del mismo partido que el secretario autonómico. Un detalle clarificador del descontrol: a pesar de haber coincidido y hablado ambos en esa reunión cara a cara, un día después de la DANA, Emergencias llamó a la exalcaldesa de Algemesí, Marta Trenzano, para preguntarle por las consecuencias de la riada en el municipio, uno de los peor parados en esta catástrofe. Sorprendente cuanto menos.  

Fuentes consultadas por Levante-EMV confirman que el descontrol en las primeras 72 horas, como mínimo, era tal, que ni el Cecopi ni el Centro de Coordinación de Emergencias de l’Eliana disponían de listados actualizados de ayuntamientos, alcaldes y alcaldesas o jefes de Policía Local. Ni siquiera de municipios arrasados, como por ejemplo Utiel: un testigo presente en el Cecopi recuerda a Argüeso pidiendo ese teléfono cuando el comité ya había empezado su primera reunión, la del 29 de octubre a las 17.00 horas. Para entonces, Utiel ya estaba bajo las aguas, Chiva estaba a punto de anegarse y un torrente letal de agua, cañas y barro bajaba por el Poio sin freno hacia l’Horta Sud. 

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