Las familias, sobre la misa en la Catedral: «Estamos nerviosos y no queremos jaleo en la Seu»

La celebración este fin de semana de la Inmaculada Concepción, patrona de España que se celebró ayer, ha anticipado el recuerdo a las víctimas y personas afectadas de la dana de la Catedral de València y la Archidiócesis.

Si bien hoy está previsto la misa funeral convocada por el Arzobispo, este fin de semana la Catedral ya había realizado oraciones en su memoria.

El sábado por la noche, tuvo lugar la tradicional Vigilia de la Inmaculada, en la víspera de la celebración de ayer, y que ya se dedicó «a rezar por los damnificados y voluntarios tras la dana». 

Organizada por la Delegación de Infancia y Juventud, los más jóvenes de la iglesia pidieron «la intercesión de nuestra Amparo por todos los valencianos: afectados y voluntarios», tras un mes en el que «nuestras vidas han cambiado por completo».

En el interior del templo, en el tablón de anuncios, un cartel reza que los actos son «por los difuntos en las trágicas inundaciones del 29 de octubre. DEP».

Ayer, la Catedral continuaba abierta al público con normalidad, y celebrando el 8 de diciembre, en honor a la Virgen; mientras que en el otro lado, los visitantes hacían cola para subir al Micalet, colgando el cartel de ‘completo’ en varios turnos.

Solo algunas vallas situadas al exterior, en dos de las tres puertas de la Iglesia, parecen los únicos ‘preparativos previos’. Hoy, la situación será diferente.

Para este lunes se han suspendido las misas habituales de las 19:00 y las 20:00 horas —como se informa a los fieles en el programa semanal que se publica en Aleluya— y se especifica que a las 19:00 horas habrá una «misa funeral por las víctimas d la Dana», a cargo del arzobispo Enrique Benavent.

Como publicó este periódico, la misa será algo más que una oración, pues se ha convertido en lo más parecido a un funeral de estado, por el momento, al no haberse celebrado aún actos organizados ni por la Generalitat ni por el Gobierno. 

A este funeral en homenaje a las 222 víctimas, asistirán los reyes Felipe VI y Letizia, que han confirmado su presencia, así como representantes institucionales y políticos entre ellos los alcaldes y alcaldesas de los municipios afectados, que han recibido la correspondiente invitación oficial por parte del Arzobispado, además personal por cada uno de los párrocos de las localidades.

También se ha hecho extensiva la invitación a los familiares de las víctimas, que dispondrán de autobuses para poder llegar a la Seu. Para ellos, el Arzobispado anunció que estará reservada «la zona central».

Delegación del Gobierno ha confirmado que se blindará el espacio, gracias a un operativo especial, «con un dispositivo importante» para «garantizar la seguridad de los asistentes». 

"Esperamos estar bien cuidados"

Familias de las víctimas que han contactado con Levante-EMV aseguran que, finalmente, se han tenido que poner ellas en contacto con el Arzobispado de València. Maribel Canut, que perdió en la dana a su hermana Eva Canut, explica que en la tarde del domingo las familias aún no tenían la acreditación para poder entrar hoy a la zona reservada de la Catedral.

Las instrucciones, según aseguró ayer, es que las recojan poco antes del acto, en la Secretaría del Arzobispado; en otros casos, será en las parroquias de los pueblos.

«Hasta que no esté allí... no llego a entender que pudieran haber hecho la misa sin nosotros» afirma la mujer, que denunció en su momento que nadie había avisado a las familias y que ahora teme problemas en el acceso a la Seu. 

«No nos han dicho absolutamente nada. Estamos nerviosos por todo lo que hemos pasado y lo que no queremos es jaleo. Me gustaría que no hubiera ningún problema, como no poder acceder porque haya mucha gente, y esperamos estar bien cuidados», confiesa a este periódico.

«Estamos viviendo un mal momento, ha pasado un mes y poco y aún estamos haciéndonos a la idea, las fechas no ayudan y no nos sentimos cómodas en las multitudes», reconoce. «Para mí, se hace la misa por Eva Canut Montoro y por las otras 221 víctimas... no queremos jaleos, pero tenemos ese miedo», asegura.

"A los familiares de las víctimas no nos ha llamado nadie para invitarnos al funeral"