La solución para eliminar la humedad en las casas y bajos inundados por la dana

Un mes después de las graves inundaciones del pasado 29 de octubre que ya han costado la vida a 223 personas en la provincia de Valencia, miles de personas siguen trabajando contrarreloj para sacar agua y lodo de sus propiedades. Quienes han conseguido limpiar sus casas y garajes del lodo y del barro que se los engulló en apenas unas horas, se enfrentan ahora a otro problema: la humedad.

Paredes, suelos, pilares, muros, muebles, marcos, puertas... las casas, bajos y garajes inundados por la ola de agua y barro del pasado 29-O soportaron durante horas y días (algunos subterráneos siguen inundados) agua que poco a poco ha ido penetrando en las estructuras de los edificios y en el subsuelo hasta empaparlo todo.

Aunque el trabajo de particulares, voluntarios y del equipo de limpieza haya logrado retirar ya miles de toneladas de barro y agua, la humedad persiste en los edificios y en las casas afectadas por la dana e impide cualquier trabajo de recuperación y vuelta a la normalidad. En el estado actual de los inmuebles, resulta imposible pintar o reparar los desperfectos sin acabar antes con la humedad que asciende desde el suelo por capilaridad hacia arriba. Aunque se usen materiales antihumedad, como pinturas o masillas de relleno, la humedad que lo impregna todo acabará saliendo en forma de manchas y hasta incluso dañando cualquier material con el que se reponga la vivienda, como madera o revestimientos.

¿Cómo quitar la humedad?

Una vez retirada el agua y el lodo hay que secar los inmuebles. Para ello existen varias alternativas, desde la más natural y lenta hasta otras más rápidas.

• Ventilar bien para que las corrientes de aire ayuden a secar. Es la solución más natural. En verano sería una solución mucho más eficaz con las altas temperaturas y la acción del sol. Sin embargo, y pese a ser otoño, sigue siendo una muy buena alternativa. Abrir ventanas y puertas en las estancias más afectadas para lograr corrientes de aire.
• Abrir 'cámaras bufas'. Es la solución que muchos arquitectos voluntarios están recomendando para acelerar el proceso de secado y drenado de la humedad. Recomiendan utilizar un taladro para perforar pequeños agujeros en la pared a un par de centímetros del zócalo o bien a unos centímetros del suelo. Hay que evitar hacer los agujeros en zonas donde pueda haber bajantes de agua o instalación eléctrica. La función de estos agujeros es lograr que la humedad drene por ellos y crear pequeños cortafuegos que impidan que siga avanzando por capilaridad hacia arriba. También permite que el agua que haya podido acceder a la cámara que existe entre los muros drene.
• Utilizar deshumidificadores. Se trata de una solución económica y rápida que puede usarse junto a las 'cámaras bufas' y permite secar el ambiente y extraer la humedad en forma de agua. Se trata de pequeños electrodomésticos con diferentes capacidades disponibles. Aunque existen modelos industriales que requieren de instalación, también hay soluciones portátiles con precios accesibles desde los 200 euros y capacidades de drenado de más de 20 litros de agua al día. Estos electrodomésticos portátiles solo requieren de una toma de corriente y al llevar ruedas se pueden utilizar en diferentes estancias en función de las necesidades.

El electrodoméstico con el que puedes secar rápidamente la ropa en casa en un par de horas

• Secadores industriales. Se trata de la solución más profesional con el uso de cañones de aire caliente que secan las paredes y el ambiente.