Las toneladas de barro arrastradas a l’Albufera presentan una baja toxicidad

Medio Natural analizó hasta sesenta muestras de lodos entre el 29 de noviembre y el 13 de diciembre para identificar los posibles riesgos de metales como el mercurio o la materia orgánica en el humedal

Las toneladas de barro arrastradas a l’Albufera presentan una baja toxicidad

JM López

Minerva Mínguez

Minerva Mínguez

Los análisis de los sedimentos, metales y materia orgánica arrastrados por las lluvias torrenciales del 29 de octubre hasta el lago de l’Albufera certifican que el «nivel de toxicidad ha sido muy reducido». La evaluación inicial llevada a cabo por la Dirección General de Medio Natural y Animal de la Conselleria de Medio Ambiente, con hasta sesenta muestras de lodos, trataba de identificar de forma preliminar los posibles restos de sustancias peligrosas que pudieran afectar a los organismos vivos presentes en el humedal. Especialmente a los ecosistemas acuáticos.

Las tomas del Test Previo de Toxicidad se realizaron entre el 29 de noviembre y el 13 de diciembre, analizando la concentración de carbono orgánico, mercurio y sólidos totales. Todos los restos analizados presentaban una concentración efectiva que reduce la luminiscencia en un 50 % mayor de 8.000 mg/l, lo que confirma que el barro llegó bastante limpio. El problema estriba en la basura y todo tipo de enseres domésticos que le acompañaron.

Además de los muestreos in situ, se ha llevado a cabo un seguimiento por teledetección de todo el arrozal y del lago a cargo del Laboratorio de Procesado de Imágenes e Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universitat de València. Los satélites permitieron comprobar el aumento del área inundada, que pasó de los 41 km2 el 26 de octubre a 70 Km2 el 31 de octubre.

Los sedimentos arrastrados por la dana llegaron hasta el litoral de Alicante a través de las golas de l’Albufera, los ríos Túria y el Xúquer. Las imágenes del satélite Sentinel muestran que la pluma de nutrientes y restos de fango permanecieron hasta un mes después frente a las costas de Dénia, Xàbia, Calp, l’Alfas del Pi, la Vila-Joiosa o Sant Joan. En los días posteriores a la gota fría se detectó una reducción drástica de la clorofila y una disminución de la transparencia.

Además de la gran cantidad de fangos también llegaron a la laguna toneladas de cañas. Acumuladas en los márgene,s aún permanecen dos meses después del desastre, obstaculizando el paso de la luz y consumiendo oxígeno en su degradación. Sobre todo en la zona oeste. El informe, realizado por encargo del Centro de Seguimiento de Humedales María Rosa Miracle de la Conselleria de Medio Ambiente, incide en la necesidad de actuaciones para su retirada.

Los daños a las zonas de reserva ha sido otra de las grandes preocupaciones de la Dirección General de Medio Natural y Animal. Dos meses después de la dana, los puntos con mayor afección son el Ullal de Tancada, en el término de Albalat de la Ribera con una gran cantidad de residuos de un vivero próximo. También la Reserva del Ullal del Samaruc, en Algemesí.

Recogida lodos producidos por la dana en las zonas afectadas

Recogida lodos producidos por la dana en las zonas afectadas / Levante-EMV

Los daños, en primavera

El personal técnico del Centro Acuícola de El Palmar CAEP (Servicio de Vida Silvestre y Red Natura 2000) ha sido el encargado de la revisión de los enclaves con presencia de especies de flora y fauna catalogadas en el ámbito del parque natural. Los daños reales no podrán ser evaluados de forma precisa hasta la primavera de 2025, cuando las especies retomen su actividad después de la pausa invernal, según los técnicos. El resultado del censo de aves del 27 al 29 de noviembre muestra que el número de anátidas registrado en 2024, con 22 ejemplares, ha sido inferior al promedio de 29.000 observados en los recuentos entre 2019 y 2021.

El seguimiento de las especies acuáticas invernantes y nidificantes en el parque natural por parte de SEO/Birdlife muestra un cambio en la distribución espacial de las aves. En la Zona de Reserva Cinegética de la laguna, especialmente en la Mata del Fang, el registro de 2024 refleja 3.000 individuos frente a los 20.000 de años anteriores. Así se ha observado un incremento significativo en los Vedats de Sueca y Cullera, con 10.000 ejemplares frente a los 7.000 habituales en otras temporadas. Estas áreas podrían estar acogiendo poblaciones desplazadas desde el norte del lago. El Vedat de Silla, con cifras destacadas siempre, ha tenido una presencia anecdótica este año, con solo 52 azulones frente a las 665 anátidas de 2023. 

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents