La izquierda ve "débil" a Mazón tras retirar el fin del tope salarial del Consell

Vox presume de haber forzado al Ejecutivo autonómico la eliminación del decreto-ley que quitaba el límite de sueldos para los altos cargos

Los miembros de la Mesa hablan antes de empezar el pleno de las Corts.

Los miembros de la Mesa hablan antes de empezar el pleno de las Corts. / José Cuéllar/Corts

Diego Aitor San José

Diego Aitor San José

La portavoz del Consell, Susana Camarero, el martes, y este miércoles el síndic del PPCV, Juanfran Pérez Llorca, defendieron que la retirada del decreto-ley que incluía la eliminación del tope salarial de los altos cargos del Consell no tenía nada que ver con la posibilidad de que la oposición provocara una derrota parlamentaria en las Corts en el pleno de esta semana, sin embargo, la interpretación en la cámara autonómica ha sido diferente por parte del resto de portavoces, desde ver "debilidad" en el 'president' Carlos Mazón hasta asumir la rectificación como un éxito propio.

Porque pese a que Vox se ha situado en la mayoría de medidas al lado del Consell, evitando que la minoría parlamentaria del PPCV acabase en votaciones perdidas, en esta ocasión su amenaza ha acabado en renuncia del Ejecutivo autonómico. O al menos, y para enmendar las palabras tanto de Camarero como de Pérez Llorca, así lo ha transmitido su síndic, José María Llanos, que ha agitado la retirada del decreto-ley anterior, en el que sí que se incluía la eliminación del tope salarial, como una medida forzada por su grupo.

"Este decreto se ha retirado gracias a Vox que dijo que no lo iba a apoyar porque no tiene sentido, es desacertado e inoportuno", ha señalado Llanos que se ha "congratulado" y "felicitado" por la retirada de la medida. Los voxistas ya señalaron la semana pasada su desacuerdo con la medida y dejaron en el aire su apoyo lo que, sumado al anunciado rechazo de PSPV y Compromís, ponía en riesgo su aprobación. Esto significaba que podían decaer todas las medidas para funcionarios pactadas con los sindicatos para dar respuesta a la dana.

No ha hecho falta llegar a la prueba de fuego que suponen las votaciones, y donde el PP podría haber sufrido un duro golpe con la pantalla parlamentaria evidenciando su minoría. El Ejecutivo autonómico ha cambiado su postura y ha retirado el decreto-ley aprobando en su lugar otro (que se votará más adelante). Este giro y la consiguiente celebración de Vox asumiéndola como un éxito, es vista por la izquierda como un ejemplo de la "debilidad" de Mazón en el parlamento valenciano y su "dependencia de la extrema derecha".

La protesta "sirve"

"Mazón es un president débil, noqueado y errático", ha señalado el síndic del PSPV, José Muñoz, que ha reiterado que se haya llevado a cabo la derogación de este decreto a unas horas de su votación cuando en su momento, el 26 de noviembre, fue la primera norma que se aprobó tras el cambio en el Ejecutivo autonómico después de la dana. Asimismo, ha indicado que el vicepresidente segundo, Francisco Gan Pampols, sí percibirá los complementos de su carrera funcionarial como si estuviera en activo, algo que se mantiene en el cambio normativo.

El síndic del PSPV, José Muñoz, durante el pleno en las Corts.

El síndic del PSPV, José Muñoz, durante el pleno en las Corts. / José Cuéllar/Corts

Línea similar a la mostrada por el síndic de Compromís, Joan Baldoví, que ha calificado de "ridículo" del Consell la retirada del decreto-ley después de que vinculara medidas para responder a la dana a esta subida de sueldo "lo que demostraba sus preocupaciones". Para el portavoz de los valencianistas, se evidencia que Mazón "es débil y está en manos de Vox" y, por otra parte, que la protesta y la indignación "sirven para que el Consell recule".

Por su parte, el portavoz del PPCV, Juanfran Pérez Llorca, ha insistido en desligar la decisión de retirar el decreto-ley y que el Consell aprobara uno nuevo a la posible derrota parlamentaria. "Ha influido que no ha hecho falta aplicarlo", ha asegurado el también secretario general de los populares valencianos tomando el mismo argumento que el día anterior hizo la vicepresidenta del Ejecutivo, Susana Camarero, al tiempo que ha tratado de apuntar hacia el comisionado del Gobierno, José María Ángel, del que ha recordado que tiene un sueldo "mucho más alto".

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