Terapias de conversión

El obispo de Alicante defiende las terapias de conversión por "acompañar a homosexuales a la castidad"

El prelado afirma que "lo que llaman 'terapia de conversión' no existe", sino que es un constructo "del marxismo para impedir a la Iglesia acompañar pastoralmente a las personas con inclinaciones homosexuales"

El obispo Munilla, en una imagen de archivo.

El obispo Munilla, en una imagen de archivo. / ALEX DOMÍNGUEZ

Gonzalo Sánchez

Gonzalo Sánchez

"Lo que llaman 'terapia de conversión', en realidad no existe". Así de tajante se ha mostrado el obispo de Orihuela-Alicante José Ignacio Munilla tras conocerse que el Ministerio de Igualdad ha abierto expediente sancionador a 7 diócesis (entre ellas la archidiócesis de Valencia) por promover y acoger pseudoterapias de este tipo, y que las Naciones Unidas equiparan a la tortura.

Para Munilla, se trata de "acompañar a personas con inclinaciones homosexuales, ayudándoles a vivir la virtud de la castidad". Aunque la posición oficial del arzobispado de València es de rechazo frontal a este tipo de prácticas, el obispo alicantino ha mostrado su apoyo público a ellas en varias ocasiones.

La última conocida fue el año pasado, en la presentación del niño "Crecer como niños, crecer como niñas", del sacerdote y profesor Óscar García Mulet. El libro, que justifica estas terapias y vende posible, inocuo y hasta deseable anular la orientación sexual homosexual e involucrarse en el rezo diario, está prologado por Munilla que además intervino en la presentación de la obra.

Por otro lado, Munilla ha utilizado en varias ocasiones su programa de radio online 'Sexto Continente' para defender estas pseudoterapias. “Si uno tiene derecho a hormonarse, hacerse no sé qué operaciones… tendrá también derecho de explorar una terapia psicológica de reversión de su homosexualidad, ¿o va a resultar que la libertad sexual solo vale para lo que la ideología lgtbi propugna?", expresó en su programa recientemente.

En ese mismo programa aseguró que "le constaba" que el profesor denunciado en Alaquàs por intentar curar la homosexualidad de sus alumnos realizaba este tipo de prácticas. De hecho, afirmó que el profesor "hizo lo que tenía que hacer".

Movimiento antiabortista

El obispo Munilla está vinculado con Spei Mater, una "Asociación Pública de Fieles", donde a su vez radica el movimiento "40 días por la Vida" que congrega a personas para rezar delante de clínicas abortistas. El propio obispo Munilla se ha dejado ver en más de una ocasión en estas vigilias, prohibidas por ley desde abril de 2022 al considerarse acoso a las mujeres que quieren decidir interrumpir voluntariamente su embarazo.

Pese a que estas prácticas están prohibidas, este grupo continua convocando vigilias frente a "abortorios" en todas las grandes ciudades de España. En Alicante y València, como figura en su web comienzan en unas pocas semanas, en turnos desde las 9 de la mañana hasta las 8 de la tarde, para que no quede ni una franja horaria sin cubrir.

Fuentes de 40 días por la Vida reivindican que "rezar en la calle o en cualquier otro lugar no está prohibido" y remarcan que "los orantes" de la entidad "no realizan ningún tipo de acoso. Oran de manera silenciosa y responden únicamente a aquellos que se acercan y necesitan hablar".

Para sortear la legislación, esta asociación controla que nunca pueda haber más de 19 personas delante de una de las clínicas, puesto que así no necesitan ninguna autorización de la Administración. La reforma de abril del 2022 castiga a quienes molestan a las mujeres que quieren abortar, y por eso su premisa es clara no acercarse ni a mujeres ni a trabajadoras, sólo rezar en voz baja.

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