Los geógrafos piden no reconstruir las zonas gravemente dañadas por la dana

Especialistas en el impacto del cambio climático sobre el territorio reunidos por la UV urgen a "desalojar los espacios de cauces y ramblas que nunca debieron ocuparse y donde hay alto riesgo para la vida humana"

Estado del barranco del Poyo a su paso por Picanya tres meses y un día después de las inundaciones.

Estado del barranco del Poyo a su paso por Picanya tres meses y un día después de las inundaciones. / JM López

Rafel Montaner

Rafel Montaner

Los especialistas en el impacto del cambio climático sobre el territorio que desde ayer reúne la Universitat de València (UV) en la primera conferencia científica sobre la relación entre el cambio climático, los usos y la gestión del territorio en el Mediterráneo ibérico, urgen «a no reconstruir ni volver a habitar las zonas gravemente afectadas por la dana de Valencia, especialmente donde haya habido muertos».

Así lo expresó ayer uno de los grandes referentes nacionales en cambio climático: el catedrático de Análisis Geográfico y director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante (UA), Jorge Olcina, quien coordina el grupo de expertos en gestión integral del riesgo de esta conferencia que inauguró ayer la rectora Mavi Mestre, destacando que el objetivo del cónclave es «poner la ciencia al servicio de una gobernanza responsable».

Según Olcina, para reducir de forma efectiva el riesgo de inundación «hay que reservar y sacrificar espacios, hay que recuperar el dominio público fluvial desalojando espacios que nunca debieron ocuparse y donde hay alto riesgo para la vida humana, habilitando mecanismos de compensación para la población afectada». Además, el catedrático subraya que «las plantas bajas en zonas en riesgo de inundación no deberían ser habitables».

Esta es una de las propuestas urgentes a implantar en el próximo año que lanzan al Estado y a las autonomías este grupo de expertos y entre las que incorporan «la paralización de los proyectos urbanísticos en tramitación que contemplen edificaciones en zonas con riesgo de inundación para que se sometan a un análisis del riesgo adaptado a las condiciones actuales del cambio climático y su proyección futura».

Paralelamente, el catedrático de Geografía Física de la Universitat de Barcelona (UB), Javier Martín Vide, que coordina el grupo de especialistas sobre las evidencias científicas del calentamiento global y sus efectos, recomendó de forma «imperativa» la creación de «un Observatorio de los Riesgos Meteorológicos del Mediterráneo en València, que bien podría ser la Comisión de Expertos en Cambio Climático prevista en la Ley Valenciana de Cambio Climático de 2022».

Durante la primera de las dos jornadas de la conferencia, coordinada por el catedrático emérito de Geografía Humana de la UV, Joan Romero, y por la catedrática de Geografía Física de la UV, Ana Camarasa, Martín Vide destacó que «el Mediterráneo es uno de los espacios más sensibles al cambio climático». El calentamiento del mar y la mayor cantidad de energía en la atmósfera en forma de vapor de agua, según este experto, «aumenta la potencialidad de las dana para ser más destructivas debido a la intensidad excepcional de las precipitaciones» como se vio en las inundaciones del pasado 29 de octubre. Este experto recuerda que el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPPC) de la ONU advierte de que los eventos climáticos extremos «serán cada vez más frecuentes, más intensos y severos», y pone como ejemplo los temporales Gloria (2020) y Filomena (2021), y ahora la dana de Valencia»

Más educación en prevención

Para el catedrático de la UB «la dana de Valencia fue excepcional, potencialmente peligrosa, con una población muy vulnerable y una pésima gestión del riesgo y de la prevención». Por ello urge a mejorar el sistema de alerta temprana y la educación sobre el riesgo. «Debe instruirse a la población en conocimiento geográfico y autoprotección», dijo Martín Vide. En este sentido, Romero insistió en que las dana en nuestro territorio son una amenaza tan peligrosa «como los terremotos en Japón o los huracanes en EE UU», por lo que todos deben saber cómo actuar ante un evento extremo. «¿Cuántos simulacros de inundación se habían hecho en l’Horta Sud?», se preguntó el catedrático de la UB.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents