El lío padre de las alertas

Mapa de alertas de AEMET el 4 de Marzo y mapa de emergencias del 112 para el mismo día. / Aemet
Enrique Moltó
Indudablemente estamos viviendo en un estado de alarma desde el 29 de octubre de 2024 y eso condiciona indefectiblemente todo lo que se decide desde entonces. Las comparaciones entre lo que se hizo el 29 de octubre y lo que se hace en el temporal actual son lógicas y no dejan en muy buen lugar lo que se hizo entonces. Al mismo tiempo, aunque siempre insistimos en el principio de precaución y en que más vale pasarse que quedarse corto, es evidente que algunas decisiones en la emergencia actual son incomprensibles para la población. El riesgo de esta columna es el de ser acusado de ventajismo de a posteriorismo, pero créanme que estoy dispuesto a mantener mi discurso. Los avisos dados por el 112 se basan en los que lanza AEMET, pero no son exactamente lo mismo y eso está generando una considerable confusión. Para acabar de arreglarlo, aunque los avisos de protección civil son numéricos también incorporan el mismo código de colores y los municipios incluidos coinciden con las zonas de AEMET. En este contexto, loa avisos naranjas de AEMET y el aviso rojo de Castellón se convirtieron para el 112 en rojos nivel 0 de emergencias para todos los municipios afectados. Con esta información, mucha gente creyó que casi toda la Comunidad Valenciana estaba en aviso rojo por lluvias cuando ya no había el miércoles ni un solo rojo meteorológico. Derivado de ese rojo del 112, muchos municipios e instituciones públicas suspendieron clases y otras actividades, a veces incluso en zonas periféricas o directamente fuera de ese rojo. En algunos casos, sobre todo en las provincias de Valencia y Castellón, esa suspensión estaba plenamente justificada, pero en algunos no tenía ningún sentido porque la previsión de los modelos no marcaba lluvia y tampoco se derivaba riesgo de inundación por lluvias en la parte alta de la cuenca. La suspensión de clases o de citas sanitarias, sin un dato científico que lo avale, en algunos de los municipios afectados genera un sentimiento de agravio comparativo entre lo público que para y lo privado que sigue, que no es nada positivo en lo social y que puede suponer una pérdida de fiabilidad para los avisos, en este caso por exceso. Más allá de la demasiado grosera delimitación, los nombres recibidos por las zonas de aviso de AEMET como Litoral Norte de Alicante, donde están algunos municipios a 50 kilómetros del mar y cuya población no se da por aludida, o el hecho de incluir en la misma zona de aviso zonas en las que, según estaba previsto, han caído más de 200 mm y otras en las que apenas se ha llegado a 10, no ayudan en la comunicación social del riesgo. Paralelamente, la portavoz del Consell defiende las distintas actuaciones en octubre y ahora mismo, diciendo que entonces ninguna agencia estatal les avisó, algo rematadamente falso, como se ve en los mensajes en tiempo real de José Ángel Núñez, y ahora sí, aunque no deja de soltar su puyita a AEMET, argumentando que ahora ha llovido el doble de lo que había previsto la agencia, 200 en vez de 100, y entonces mucho más de los 180 previstos. Estimada portavoz, los números de precipitación que marca AEMET son umbrales, cifras de las que partir. No se puede hacer mejor, ya quisieran un buen número de ciencias o la propia clase política acertar tanto en las previsiones numéricas. El mensaje de ES-Alert es mucho mejor que el de octubre en tiempo y forma, y la necesidad de mejorar los protocolos y de reformar las zonas de aviso de AEMET y de unificar en un único tipo de alerta lo meteorológico, lo hidrológico y emergencias resulta indiscutible.
- La DGT instala un nuevo radar en una de las carreteras más transitadas de Valencia
- Doscientas personas en lista de espera y cuatro meses para conseguir plaza en un albergue
- Bebés sin nacionalidad: ni tarjeta sanitaria ni ayudas para la guardería
- Monumental atasco en la V-30 por un camión en llamas
- La construcción de embalses en Vilamarxant y Cheste hubiera cambiado el impacto del 29-O
- ¿Los embalses en Cheste y Vilamarxant hubieran evitado las inundaciones del 29-O?
- La jueza de la dana admite a Ciudadanos en el proceso pero le pide que pague 6.000 euros
- Pradas se presenta como 'cabeza de turco' y culpa al Gobierno por los fallos