La diputación remodela Personal en medio de una guerra entre funcionarios

El empleado de mayor rango, el secretario general, envía una carta a toda la plantilla respondiendo a un boletín de un sindicato crítico y con reproches al ya exjefe de Personal

“Nunca he visto algo así”, dice un veterano empleado sobre la trifulca en torno a la gestión de recursos humanos desde hace meses

Vicent Mompó ficha a una nueva jefa de Personal de fuera de la casa y sitúa a su mano derecha como diputada del área

Diputación de Valencia.

Diputación de Valencia. / Europa Press

José Luis García Nieves

José Luis García Nieves

València

El presidente de la Diputación de Valencia, Vicent Mompó, está afrontando cambios en el área de Recursos Humanos, tanto políticos como funcionariales, situando al frente a personas de su máxima confianza. Y lo hace en medio de una batalla de personal que la semana pasada vivió un nuevo capítulo.

El secretario general de la corporación, el encargado de velar por la legalidad de los actos administrativos, envió un escrito a toda la plantilla respondiendo a la nota informativa de un sindicato crítico con su gestión, Intersindical STAS. Es un gesto inédito en la diputación, o al menos no lo recuerdan ni los más veteranos del lugar. “Nunca he visto algo así”; “en la vida había pasado eso”, señalaban el pasado lunes dos funcionarios de largo recorrido sobre la batalla en torno a la gestión del personal, que ya ha adquirido dimensión pública.

El movimiento del secretario, habilitado nacional y por tanto uno de los más altos funcionarios de la casa, da buena cuenta del nivel de tensión dentro de la institución desde hace un año, del que ha venido informando este diario, con disputas entre funcionarios, sindicatos y también el equipo de gobierno.

Las disputas han pivotado en torno a los altos funcionarios, especialmente el mencionado secretario general, Vicente Boquera, y al ya exresponsable de recursos humanos, Javier Bolinches, que llegó en mayo de 2024, pero que ha renunciado a su plaza y regresado a la Generalitat este mes, menos de un año después. En este tiempo hubo profundos desacuerdos por algunos de los cambios que quiso introducir este último, como que los habilitados ficharan en su puesto de trabajo, o modificar la concesión de complementos salariales.

Esa falta de sintonía ha terminado afectando a la gestión política. La última modificación de la relación de puestos de trabajo, firmada por el ya exresponsable de personal, fue recibida por el secretario con un informe jurídico muy duro. Tanto que el pleno en que debía aprobarse decidió dejarla sobre la mesa hasta aclarar si era legal o no. En ese pleno, el equipo de gobierno cargó contra el secretario general, una interpelación directa a un funcionario también inédita en la historia de la corporación, y que se leyó como una pérdida de confianza.

Fue precisamente ese tira y afloja respecto a los cambios en la RPT lo que motivó un comunicado del sindicato Intersindical STAS contra el secretario. El sindicato cuestionaba las “incoherencias del sr. secretario en sus informes”. Se refería al hecho de que hubiera informado de manera exhaustiva en contra de unos cambios que validó poco después. La semana pasada, ante la sorpresa de toda la corporación, el propio secretario emitía una nota de respuesta, en el que ejerce “su derecho de réplica”. El secretario señalaba connivencia entre el sindicato crítico y el ya exjefe de Personal, con el que estaba abiertamente enfrentado, y afea a Intersindical que ahora le critique cuando en otras ocasiones sí ha utilizado sus informes para armar jurídicamente demandas contra acuerdos de la diputación.

Nuevas responsables en Personal

Este es el clima, el momento y el contexto en el que Vicent Mompó ha decidido acometer algunos cambios clave. A nivel funcionarial, salvo sorpresa, aterrizará como nueva responsable de Recursos Humanos María Escamilla, habilitada nacional y actual presidenta de Cosital. Es la elección que se perfila, una funcionaria de la máxima confianza del presidente, a la que conoce de hace años ya que fue secretaria-interventora en Gavarda, pueblo del que es alcalde. La decisión envía un mensaje: sitúa una persona de su entorno próximo para apaciguar un área conflictiva (será la tercera persona que ocupa esta plaza en menos de un año).

En paralelo, Mompó cambia también al diputado responsable del área. El relevo se enmarca en la remodelación del equipo de gobierno para aliviar la carga de trabajo de los diputados que son alcaldes en pueblos afectados por la dana. En este sentido, el alcalde de Utiel, Ricardo Gabaldón, cede la delegación de Personal a la vicepresidenta segunda, Reme Mazzolari, mano derecha de Mompó en el equipo de gobierno.

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