"Viajamos con la ilusión de verle, pero rezaremos ante su cuerpo"

Organizaron el viaje con la esperanza de ver al papa Francisco, aunque solo fuera de lejos y unos instantes. Sin embargo, la noticia de su fallecimiento les llegó mientras embarcaban, rumbo a Asís, para empezar un viaje que ya es seguro que no olvidarán. En la tarde del martes tenían previsto llegar a Roma. Se trata de un grupo de 32 fieles de la parroquia de la Asunción, en Riba-roja de Túria, guiados por el sacerdote Javier Grande, que no ha dudado en explicar a Levante-EMV lo que ha pasado a significar este viaje para la comitiva.

"Este Año Jubilar tenemos dos viajes previstos. Este es el primero, con edades dispares, entre los 16 y los 80 años. El segundo viaje es para gente más joven, más de cara al verano. Mientras estábamos embarcando nos llegó la noticia del fallecimiento del papa Francisco. Salíamos con la ilusión de poder verle, porque sabíamos que salía en algunas ocasiones, aunque la audiencia general estaba suspendida. No podrá ser, pero nos acercaremos a rezar antes su cuerpo porque ha sido un regalo para la Iglesia", explica el párroco. Y añade: "Cada papa es la respuesta de Dios al momento que se vive, y este papa ha sido un grandísimo regalo para la situación que estaba viviendo la Iglesia".

Una celebración por los 80 años y un aniversario de boda

Este grupo de peregrinos empezó el viaje con la noticia del fallecimiento del Santo Padre y dos celebraciones marcadas en el calendario: los 80 años de la mujer más mayor de la comitiva y el 40 aniversario de una pareja, también inmersa en el viaje. "Desde el principio ha sido un viaje con muchas emociones. Nos apena la muerte del papa Francisco porque queríamos mucho a este papa. Pero, a la vez, es una sorpresa saber que podemos vivir este momento tan importante y le podemos acompañar a él en su última peregrinación. Ha sido un papa muy peregrino y ahora nos toca a nosotros acercarnos hasta él y rezar ante su cuerpo. Por él y ante él. Le debemos mucho. Ha sido muy especial y muy generoso", explica Grande.

La comitiva regresará a Valencia este viernes. Han tenido que realizar algunos cambios en su itinerario y en la planificación del viaje. "Teníamos previsto celebrar la última eucaristía en la Iglesia de Santa María la Mayor, donde será enterrado el papa Francisco. Ahora tenemos que ver qué podemos hacer al respecto porque entendemos que la muerte del papa lo cambio todo", explica.

Querían ver al papa Francisco y habían planificado un viaje que ha resultado muy distinto a la organización original. Sin embargo, no hay quejas ni lamentos en este grupo. Lo que sí hay es una gran emoción por despedir a quien ha significado un antes y un después en la Iglesia católica. Y la sensación de ser partícipes de un hecho histórico.