Imprescindibles que no se apagan en las grandes crisis

Los imprescindibles de las grandes crisis volvieron a emerger con fuerza el pasado lunes, como en la pandemia o la dana, cuando el apagón energético dejó a España y Portugal sin suministro eléctrico. Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Bomberos, personal sanitario y del 112, Cruz Roja o Protección Civil, entre otros, resultaron decisivos en las largas horas de desconexión. Fueron los más visibles, pero también resultaron esenciales otros protagonistas, precarizados y casi invisibles, que son irremplazables en el feminizado mundo de los servicios sociales.

Cruz Roja

«No solo actuamos en las catástrofes» . No hay emergencia o catástrofe donde Cruz Roja no esté presente. Forman parte del centro de operaciones integrado del 112 así que reciben información de primera mano y activan sus protocolos de forma inmediata como una parte más del servicio de Emergencias de la Generalitat. «No solo actuamos en catástrofes. Estamos presentes en grandes dispositivos (Fallas, la festividad de la Virgen, maratones…) El 80 % del tiempo el trabajo se concentra en la planificación para que la actuación sea precisa y útil en cuanto se activen los protocolos mediante los diferentes Equipos de Respuesta Inmediata de Intervención (de Atención Psicosocial; albergues provisionales; búsqueda; primera respuesta en la llegada de embarcaciones; y coordinación y comunicación). La entidad cuenta con 26 asambleas locales en la provincia de Valencia (hay 70 en toda la Comunitat Valenciana) y como novedad tras la dana y el apagón del pasado lunes se ha decidido que «las asambleas locales tengan autonomía para ayudar en su zona si es necesario». «Todas las asambleas cuentan con un equipo mínimo de respuesta, así que,en lugar de tener que esperar la orden o la coordinación desde los puestos centrales, cada asamblea tendrá autonomía para actuar en su municipio si así lo necesita», explica el responsable provincial, Vicente Calatrava.

Hospitales

«Cuando todos los aparatos pitan hay que mantener la calma». «En los hospitales no hay ningún problema porque ante un apagón entran en funcionamientos los grupos electrógenos y todos los meses hay pruebas para ver que funcionan correctamente», explica Vicente Domingo, de la Sociedad Valenciana de Anestesiología tras añadir que en el hospital donde trabaja (Arnau de Vilanova) «las intervenciones previstas durante la mañana se realizaron sin problema alguno y, por precaución, se reprogramaron las de la tarde». Así, el mayor problema «se produjo a la hora de comunicarnos, ya que lo que fallaron fueron las transmisiones». «Aunque no de forma obligatoria, sí recibimos formación para saber actuar si, incluso, el quirófano se quedara sin electricidad». «En los hospitales, las salas de UCI y REA (Reanimación y cuidados críticos de adultos) sí viven un estrés puntual cuando se sucede un apagón y los dispositivos pasan de estar conectados a la red a estarlo a las baterías y al grupos electrógenos)», señala Domingo. «Se trata de unos segundos donde todos los aparatos pitan y se encienden para advertir que ha fallado la red y debes comprobar que todo funciona correctamente en los pacientes que cada enfermera tiene asignados en estas unidades. Pero hacemos comprobaciones constantes y pruebas, así que es seguro. Cuando pasa, el estrés dura segundos, pero hay que afrontarlos», explica a Levante-EMV Laura García, enfermera con más de una década de experiencia en estos departamentos.

Residencias y centros

«El compromiso con los más vulnerable nunca se detiene». El personal que trabaja en residencias de mayores se mostró imprescindible durante la pandemia de la covid y volvió a hacerlo el pasado lunes, cuando el país se sumió en la oscuridad. Las trabajadoras siempre están y ante los problemas surgidos no dudaron en ingeniárselas para solventar unas incidencias que, eso sí, mostraron la necesidad de que todos los centros cuenten con grupos electrógenos que garanticen el suministro eléctrico, igual que ocurre en hospitales y centros de salud. La vicepresidenta Susana Camarero tomó buena nota de ello y decidió que los nuevos pliegos de condiciones especifiquen la obligación de disponer de grupos electrógenos y que el decreto de Tipologías marque cómo y qué servicios deben garantizar estos generadores de energía en los centros de mayores. «El compromiso de nuestros profesionales con las personas más vulnerables nunca se detiene. Los equipos de atención a la dependencia demostraron una vez más que son esenciales para el bienestar de nuestras personas mayores y dependientes, asegurando que sus derechos y necesidades se atendieran incluso en las circunstancias más adversas», explican desde la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunitat Valenciana (Aerte). Así, su presidente, José María Toro, recalca la respuesta ejemplar de los equipos en las residencias, centros de día y servicios de ayuda a domicilio. «Gracias a su trabajo riguroso y su compromiso ético, fue posible coordinar recursos, activar protocolos y apoyar a los equipos sobre el terreno, demostrando que detrás de cada profesional hay una estructura sólida y preparada que da respaldo y sentido a su labor diaria», subraya.

CICU y rescates

Transportes urgentes y miles de incidentes en unas horas. Los Centros de Información y Comunicación de Urgencias (CICU) registraron desde el inicio del apagón y hasta primera hora del martes 1.889 incidentes. Un 25 % corresponden a emergencias sanitarias, un 12 % a transporte urgente, un 4 % a consultas sanitarias, un 4 % a urgencias sanitarias, un 2 % a transporte interhospitalario y el 53 % restante a actividad no protocolizada y de coordinación. Destacan las 151 asistencias a pacientes con dificultad respiratoria, 113 por repuesto de balas de oxígeno o baterías de los respiradores o 56 salvamentos o rescates en los que se requirió la intervención del CICU, que fundamentalmente se produjeron por ascensores bloqueados.

Ayuda y cuidados

«Tienes una implicación emocional con la gente a la que cuidas». Son invisibles y precarias, pero su trabajo sostuvo la vida de muchísimas personas vulnerables durante el apagón. Mientras la luz se iba ellas estaban con personas mayores en hospitales, o con gente dependiente en sus casas, acompañándolas y ayudándolas. Las empleadas domésticas dicen que su trabajo (el de cuidados, tan denostado desde siempre) sostiene la vida. Y durante la apagón esa frase cobró todo el sentido. Dolores Jacinto, portavoz de la Asociación Intercultural de Profesionales del Hogar y los Cuidados (Aiphyc) explica que, pese a ser festivo, muchas empleadas domésticas vivieron el apagón con sus empleadores y las que no, trataron de comunicar con ellos. «Son mujeres que lo dan todo, al final es normal tener cierta implicación emocional con la gente que cuidan», cuenta.

Suministros básicos

«Asegurar el abastecimiento de las potabilizadoras». «Al margen de que las comunicaciones por teléfono cayeron, todas las presas están dotadas de grupos electrógenos por lo que pudieron hacer las maniobras programadas sin problema», señalan desde la Confederación Hidrográfica del Júcar. «Desde Tous, se decidió incrementar las sueltas porque se supuso que la potabilizadora de Manises podría tener problemas de abastecimiento», explican.

Fuerzas de Seguridad

«Seguridad garantizada en todo momento» en cárceles y calles. Las cárceles de la Comunitat Valenciana no se vieron especialmente afectadas gracias al funcionamiento de los grupos electrógenos. Desde Instituciones Penitenciarias aseguran que no hubo ningún incidente grave y «en todo momento la seguridad estuvo garantizada», tanto por el servicio autónomo de estos grupos electrógenos de gran potencia como por la coordinación de las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado. «Los funcionarios dieron más de sí para tranquilizar a los internos y evitar cualquier tipo de incidente», señalan desde la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias. El amplio operativo de Policía Nacional y de Guardia Civil desplegado fuera, en las calles, permitió además reducir un 30 % la criminalidad tal como destacaba la Delegación del Gobierno. n

Los imprescindibles de las grandes crisis volvieron a emerger con fuerza el pasado lunes, como en la pandemia o la dana, cuando el apagón energético dejó a España y Portugal sin suministro eléctrico. Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Bomberos, personal sanitario y del 112, Cruz Roja o Protección Civil, entre otros, resultaron decisivos en las largas horas de desconexión. Fueron los más visibles, pero también fueron esenciales otros protagonistas, precarizados y casi invisibles, que resultan irremplazables en el feminizado mundo de los servicios sociales.

Cruz Roja

«No solo actuamos en las catástrofes» . No hay emergencia o catástrofe donde Cruz Roja no esté presente. Forman parte del centro de operaciones integrado del 112 así que reciben información de primera mano y activan sus protocolos de forma inmediata como una parte más del servicio de Emergencias de la Generalitat. «No solo actuamos en catástrofes. Estamos presentes en grandes dispositivos (fallas, la festividad de la Virgen, maratones…) El 80 % del tiempo el trabajo se concentra en la planificación para que la actuación sea precisa y útil en cuanto se activen los protocolos mediante los diferentes Equipos de Respuesta Inmediata de Intervención (de Atención Psicosocial; albergues provisionales; búsqueda; primera respuesta en la llegada de embarcaciones; y coordinación y comunicación). La entidad cuenta con 26 asamblea locales en la provincia de Valencia (hay 70 en toda la Comunitat Valenciana» y como novedad tras la dana y el apagón del pasado lunes se ha decidido que «las asambleas locales tengan autonomía para ayudar en su zona si es necesario». «Todas las asambleas cuentan con un equipo mínimo de respuesta así que, en lugar de tener que esperar la orden o la coordinación desde los puestos centrales, cada asamblea tendrá autonomía para actuar en su municipio si así lo necesita», explica el responsable provincial, Vicente Calatrava.

Hospitales

«Cuando todos los aparatos pitan hay que mantener la calma». «En los hospitales no hay ningún problema porque ante un apagón entran en funcionamientos los grupos electrógenos y todos los meses hay pruebas para ver que funcionan correctamente», explica Vicente Domingo, de la Sociedad Valenciana de Anestesiología tras añadir que en el hospital donde trabaja (Arnau de Vilanova) «las intervenciones previstas durante la mañana se realizaron sin problema alguno y, por precaución, se reprogramaron las de la tarde». Así, el mayor problema «se produjo a la hora de comunicarnos, ya que lo que fallaron fueron las comunicaciones». «Aunque no de forma obligatoria, sí recibimos formación para actuar ante este tipo de emergencia para saber actuar si, incluso, el quirófano se quedara a sin electricidad». En los hospitales, las salas de UCI y REA (Reanimación y cuidados críticos de adultos) sí viven un estrés puntual cuando se sucede un apagón y los dispositivos pasan de estar conectados a la red a estarlo a las baterías y al grupos electrógenos)», señala. «Se trata de unos segundos donde todos los aparatos pitan y se encienden para advertir que ha fallado la red y debes comprobar que todo funciona correctamente en los pacientes que cada enfermera tiene asignados en estas unidades. Pero hacemos comprobaciones constantes y pruebas, así que es seguro. Cuando pasa el estrés dura segundos, pero hay que afrontarlos», explica Laura García, enfermera con más de 10 años de experiencia en estos departamentos.

Residencias mayores

«El compromiso con los más vulnerable nunca se detiene». El personal que trabaja en residencias de mayores se mostró imprescindible durante la pandemia del Covid-19 y volvió a hacerlo el pasado lunes, cuando el país se sumió en la oscuridad. Las trabajadoras siempre están y ante los problemas surgidos no dudaron en ingeniárselas para solventar unas incidencias que, eso sí, mostraron la necesidad de que todos los centros cuenten con grupos electrógenos que garanticen el suministro eléctrico, igual que ocurre en los hospitales y centros de salud. La vicepresidenta Susana Camarero tomó buena nota de ello y decidió que los nuevos pliegos de condiciones especifiquen la obligación de disponer de grupos electrógenos y que el decreto de Tipologías marque cómo y qué servicios deben garantizar estos generadores de energía en los centros de mayores. «El compromiso de nuestros profesionales con las personas más vulnerables nunca se detiene. Los equipos de atención a la dependencia demostraron una vez más que son esenciales para el bienestar de nuestras personas mayores y dependientes, asegurando que sus derechos y necesidades se atendieran incluso en las circunstancias más adversas», explican desde la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunitat Valenciana (Aerte). Así, el presidente de Aerte, José María Toro recalcó la respuesta ejemplar de los equipos en las residencias, centros de día y servicios de ayuda a domicilio. «Gracias a su trabajo riguroso y su compromiso ético, fue posible coordinar recursos, activar protocolos y apoyar a los equipos sobre el terreno, demostrando que detrás de cada profesional hay una estructura sólida y preparada que da respaldo y sentido a su labor diaria», subrayaba.

CICU

Transportes urgentes y miles de incidentes en unas horas. Los Centros de Información y Comunicación de Urgencias (CICU) registraron desde el inicio del apagón y hasta primera hora de este martes 1.889 incidentes. Un 25 % corresponden a emergencias sanitarias, un 12 % a transporte urgente, un 4 % a consultas sanitarias, un 4 % a urgencias sanitarias, un 2 % a transporte interhospitalario y el 53 % restante a actividad no protocolizada y de coordinación. Del total de avisos gestionados, destacan las 151 asistencias a pacientes con dificultad respiratoria, 113 corresponden a peticiones de repuesto de balas de oxígeno o baterías de los respiradores o 56 salvamentos o rescates en los que se requirió la intervención del CICU, que fundamentalmente se produjeron por apertura de ascensores.

Ayuda a domicilio

«Tienes una implicación emocional con la gente a la que cuidas». Son invisibles y precarias, pero su trabajo sostuvo la vida de muchísimas personas vulnerables durante el apagón. Mientras la luz se iba ellas estaban con personas mayores en hospitales, o con gente dependiente en sus casas, acompañándolas y ayudándolas. Las empleadas domésticas dicen que su trabajo (el de cuidados, tan denostado desde siempre) sostiene la vida. Y durante la apagón esa frase cobró todo el sentido. Dolores Jacinto, portavoz de la Asociación Intercultural de Profesionales del Hogar y los Cuidados (Aiphyc) explica que, pese a ser festivo, muchas empleadas domésticas vivieron el apagón con sus empleadores y las que no, trataron de comunicar con ellos. «Son mujeres que lo dan todo, al final es normal tener cierta implicación emocional con la gente que cuidan», cuenta.

Aeropuertos

«Logramos que el 94 % de los vuelos operaran ese día». El apagón sí dejó durante la jornada retrasos en la operativa de Manises, aunque las instalaciones pudieron seguir funcionando sin interrupción gracias a los grupos electrógenos propios con los que cuenta para situaciones de emergencia y que permitió tener electricidad aunque la red general estuviera caída. Como prueba de ello y del menor impacto en el resto de aeródromos nacionales, la patronal de las aerolíneas en España (ALA) destacó que alrededor del 94 % de los vuelos se lograron operar durante la jornada.

Embalses

«Asegurar el abastecimiento de las potabilizadoras». «Al margen de que las comunicaciones por teléfono cayeron, todas las presas están dotadas de grupos electrógenos por lo que pudieron hacer las maniobras que tenían programadas sin problema», señalan desde la Confederación Hidrográfica del Júcar. «Desde Tous, se decidió incrementar las sueltas porque se supuso que la potabilizadora de Manises podría tener problemas de abastecimiento, dado que la toda de agua del Turia no se realiza por gravedad sino con sistemas de bombeo», explican.

Prisiones

«Seguridad garantizada en todo momento». Las cárceles de la Comunitat Valenciana no se vieron especialmente afectadas gracias al funcionamiento de los grupos electrógenos. Desde Instituciones Penitenciarias aseguran que no hubo ningún incidente grave relacionado con el apagón y «en todo momento la seguridad estuvo garantizada», tanto por el servicio autónomo de estos grupos electrógenos de gran potencia como por la coordinación de las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado. «Los funcionarios dieron más de sí para tranquilar a los internos y evitar cualquier tipo de incidente», señalan desde la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias.